Lorena de la Fuente permite, por segundo año consecutivo, el consumo de alcohol en las gradas del Coliseum
Por segundo año consecutivo, la concejal responsable del Coliseum
Burgos, Lorena de la Fuente, ha optado por hacer la vista gorda en lo
que a cumplir la ley de Prevención de Drogodependencia de la Junta se
refiere.
Y
es que, guste más o guste menos, desde que la Plaza de Toros se
convirtió en un pabellón multiusos quedó sujeta al lo que especifica el
Artículo 23.4 en su apartado b: “No se permitirá la venta y el consumo
de bebidas alcohólicas en instalaciones y recintos deportivos, salvo los
lugares expresamente habilitados al efecto (…)”. Es decir, solo se
puede consumir alcohol en las dependencias habilitadas a tal efecto, no
en las gradas.
Sin embargo, una vez más, pudimos observar cómo durante la celebración de la Feria de Toros, la edil ha permitido que los asistentes consuman alcohol desde las gradas del pabellón.
Sin embargo, una vez más, pudimos observar cómo durante la celebración de la Feria de Toros, la edil ha permitido que los asistentes consuman alcohol desde las gradas del pabellón.
Para De la Fuente, la ley es una “recomendación” de la Junta de
Castilla y León. Preguntada por este medio, la concejal admitió contar
con autorización del área de Sanidad del Ayuntamiento de Burgos, algo,
como poco, extraño ya que una administración no puede excepcionar una
norma de rango superior.
Aún así, De la Fuente se comprometió a enviar a Canal54 dicha
autorización aunque, en el transcurso de la conversación, dudó de si
existía un documento escrito a tal efecto.
El papel de la administración pública en la prevención del consumo
masivo de alcohol es fundamental y son muestras como esta las que, poco a
poco, van haciendo mella entre los más pequeños, que acaban percibiendo
como mensaje que el binomio alcohol y fiesta o alcohol y madurez van de
la mano.
Pero lo sorprendente es la actitud pasota y despreocupada de la
concejal que, por segundo año consecutivo, se convierte en cómplice de
la promoción del consumo de alcohol, tirando balones fuera y permitiendo
que se consuma alcohol en las gradas de un pabellón en el que, además,
hay numeroso público infantil y juvenil.
En su intento por justificar lo injustificable, la edil dijo que en
ese momento el Coliseum funciona como plaza de toros. Los edificios
pueden llegar a tener diferentes usos, pero no modificar su licencia
cada semana según convenga, como ya ha quedado acreditado en el Centro
de Creación Musical.
No es la primera vez que la edil popular hace y deshace a su antojo
en el coliseum. Cabe recordar el campeonato de Superenduro, cuya
celebración permitió a pesar de no contar con los informes preceptivos.
Fuente: Canal54.es