La Plataforma de la N-I convocará concentración la próxima semana
Rafael Solaguren afirma que, si bien se ha mejorado la señalización, el riesgo sigue ahí debido al elevado tráfico que soporta la nacional
La Plataforma de Vecinos Afectados por la N-I volverá a concentrarse para denunciar el último accidente mortal registrado en la vía burgalesa. Un hombre perdió ayer la vida tras colisionar dos vehículos en Castil de Peones, en un suceso que ha dejado otros cuatro heridos y en el que, «afortunadamente», no se ha visto implicado ningún camión, pues la desgracia podría haber sido mayor.
Así lo recuerda el portavoz del colectivo vecinal, Rafael Solaguren, quien insiste en que la «suerte» se ha acabado y, tras
los graves siniestros de septiembre, en los que perdieron la vida un
camionero en Monasterio de Rodilla y cinco miembros de una misma familia
en Pancorbo, la vía no había vuelto a registra un accidente
mortal. Siniestros de tráfico sí, pero sin muertos, ha afirmado
Solaguren, si bien los graves pueden llegar en cualquier momento.
Y
es que, tras más de 20 años de lucha, el Gobierno central todavía no ha
puesto solución al problema de la N-I, así que seguimos lamentando
fallecimientos. Por ese motivo, la plataforma se concentrará la próxima
semana en el lugar del accidente de ayer noche. Todavía no están
cerrados los detalles de la convocatoria, ha explicado Solaguren, pero
será el miércoles o el jueves en horario de tarde, casi con total seguridad.
Mejoras de seguridad insuficientes
El portavoz ha reconocido que algunas de las últimas medidas de seguridad tomadas por Fomento, como la
mejora de la señalización y la reducción a 80 de la velocidad máxima en
algunos tramos, han contribuido a mejorar la seguridad de la vía,
si bien son insuficientes. Hacen más estos pequeños detalles que
anuncios como el desvío obligatorio de camiones a la AP-1, sobre todo
porque todavía no se ha hecho efectivo, y la nacional continúa
soportando un intenso tráfico.
La plataforma ha vivido con
inquietud las Navidades, pues es época de grandes desplazamientos y el
«riesgo» de accidente es elevado. Por desgracia, y antes de que finalice
el operativo especial de tráfico, Burgos tiene que lamentar una víctima
mortal, la primera del año. La N-I es la carretera más peligrosa de la provincia, ha insistido Rafael Solaguren, quien recuerda que la solución al problema es clara: la liberalización de la AP-1.
2018 va a ser un año clave, pues a finales de noviembre finaliza la concesión de la autopista, si bien «nada se sabe aún». Rafael Solaguren apela a «no quedarse dormidos» pues, a su juicio, parece que «no hay intención de acabar con el negocio»
que supone la autopista de peaje. El portavoz reclama a los políticos
que luchen por la liberalización, pues no valen solo palabras cuando la
N-I acumula 255 fallecidos desde 1994.
Fuente: BURGOSconecta.com