viernes, 7 de mayo de 2010

¿EXISTE LA PARTICIPACIÓN CIUDADANA EN BURGOS?



Los políticos se llenan la boca hablando de participación ciudadana, hacen Reglamentos que no cumplen, y sólo se acuerdan de dicha participación ciudadana en las elecciones. ¿Qué voluntad política existe para ponerla en juego?, creemos que muy poca o ninguna, según ellos los ciudadanos sólo podemos participar cada cuatro años en las elecciones, y eso es para ellos la participación.La Constitución Española declara que la participación ciudadana recae sobre cada una de las personas, ciudadanos. Y no, sobre los Consejos de Barrio, etc.
Hay que recordarles que la Democracia se sustenta en el imperio de la Ley emanada de la soberanía popular, sólo los ciudadanos son los depositarios primigenios de dicha participación, ya que sin ciudadanos no hay Democracia, Asociaciones, etc.
Para que exista una Participación Ciudadana de Burgos, es necesaria una información transparente y pública, acatar unas normas para que ciudadanos y Asociaciones puedan corresponsabilizarse, y que sus opiniones valgan para algo.Así lo establece el Reglamento de Participación Ciudadana, tantas veces incumplido.
La Participación ciudadana es una pieza fundamental del sistema democrático, sin ésta, no puede haber democracia plena que permita recuperar la confianza en la política y los políticos, para ello los Ayuntamientos deben de cumplir las leyes y normas, ya que si no, se corre el riesgo de que se desacrediten los instrumentos de participación, por lo tanto el Ayuntamiento debe cumplir dichas leyes y normas como: Sentencia del CEIS tres años sin cumplir, Consejo de Barrio de Gamonal más de 7 meses en situación irregular, etc.
Si queremos una participación ciudadana, hay que dársela a los ciudadanos. El cumplimiento del Reglamento de Participación Ciudadana, exige una manera de gobernar que trate a los ciudadanos como personas implicadas e inteligentes, por lo tanto, comparten poder y responsabilidad.Esto implica que hay que hacer Presupuestos Participativos de verdad, contar con los ciudadanos en las cosas que les atañen y que les son próximas, porque si no, nunca habrá una democracia participativa y habremos acabado con la Participación Ciudadana.