La exigencia de dimisión de Lacalle atasca el acuerdo de Villalonquéjar
El alcalde ve razonable las condiciones y los socialistas creen que se olvida de la primera
Mientras el alcalde Javier Lacalle,
contestaba a los socialistas que veía «razonables» las cuatro
condiciones propuestas para llegar a un acuerdo sobre la deuda del
consorcio de Villalonquéjar, por su parte el PSOE consideró que se
estaba olvidando de la «primera y más importante» cláusula.
Los concejales socialistas exigen su
dimisión a 1 de enero de 2019 si el Partido Popular no logra modificar
la clasificación que tiene en la actualidad el consorcio, administración
pública, que hace que el conjunto de la deuda, los 109,8 millones, se
vaya a imputar al Ayuntamiento a 1 de enero de 2019.
Después de haber estudiado durante el
fin de semana los cuatro aspectos que para los socialistas eran de
obligado cumplimiento, Lacalle remitía al portavoz del grupo socialista y
a los medios de comunicación un escrito de tres folios asegurando que,
«en general, nos parece razonable y aceptable».
La respuesta del grupo socialista no se
hizo esperar más que unas pocas horas. Y en ella constatan que Lacalle
no está dispuesto a aceptar la principal condición, algo que «haría
imposible nuestro apoyo».
El PSOE considera imprescindible que el
consorcio pase a clasificarse como sociedad no financiera para conseguir
que solo se impute al Ayuntamiento alrededor de 30 millones de euros
(la llamada deuda no sostenible), en lugar de los 109,8 millones (el
conjunto de la deuda del consorcio con las entidades financieras
Caixabank e ICO).
A este respecto concreto, el primer edil
manifiesta que está dispuesto a adquirir el compromiso de solicitar el
cambio de clasificación ante la Oficina de Contabilidad Europea. Sin
embargo, explica que duda de que a 1 de enero de 2019 se haya conseguido
este objetivo para que el consorcio pase de ser considerado
administración pública a sociedad no financiera. «Cabe señalar que hasta
esa fecha (1 de enero de 2019) dicha oficina y los profesionales
técnicos de Eurostat no habrán procedido aún a estudiar nuevas
clasificaciones sino que es a partir de esa fecha, durante el primer
trimestre del año cuando lo valora España y alguna semana después cuando
se decide en Luxemburgo», recoge el texto de la carta de Lacalle a De
la Rosa.
A partir de este epígrafe concreto, los
socialistas le indican en su contestación que estarían dispuestos a
modificar la redacción de esa condición. De esta manera, aplazan la
petición de dimisión hasta febrero de 2019 para que la oficina técnica
de Eurostat haya tenido tiempo de estudiar la clasificación del
consorcio de Villalonquéjar. Continúa el texto de la carta de Daniel de
la Rosa indicando que si está de acuerdo en la «inclusión textual» de
esa condición, en lo que respecta al grupo socialista puede proceder a
redactar el acuerdo.
Con respecto al resto de condiciones,
parece que los socialistas no tienen dudas sobre la disposición del
regidor municipal hacia su cumplimiento. El PSOE reclama la necesidad de
negociar que las entidades bancarias no apliquen los intereses de
demora y Lacalle responde que «se puede plantear a las entidades y que
debiera ser factible de conseguir dado que se había logrado hasta el
pasado 31 de octubre». Además, se impulsará el cambio de los estatutos
de los consorcios del desvío y de Villalonquéjar. Sobre este punto
Lacalle se muestra dispuesto a trabajar después de la fiesta de Reyes.
Con respecto a la posibilidad de renegociar con los bancos en un plazo
de siete años, en el caso en el que se ralenticen las ventas de suelo
industrial, el alcalde lo ve razonable.
Fuente: Correo de Burgos
