martes, 17 de enero de 2023

POR FÍN SE AMPLIA EL PARKING DE LAVADEROS

 Adiós a la casa del aparcamiento de Lavaderos. Su derribo propiciará 8 nuevas plazas de estacionamiento

El derribo, que empezó por la mañana, ha sido cuestión de horas, y ahora queda la urbanización para generar unas pocas plazas de estacionamiento

La demolición del edificio de viviendas que se ubicada en el aparcamiento de Lavaderos, en las traseras de la calle Vitoria, ha comenzado esta misma mañana. Y previsiblemente será cuestión de horas su derribo si bien luego quedarán varias semanas de trabajos hasta que se acondicione la zona como aparcamiento.

Así lo explicaba el concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Burgos, Daniel Garabito, que recordaba que estos trabajos están vinculados con la Unidad de Actuación 47.03, un sector discontinuo que afecta a una promoción de viviendas que se edificará frente a la Antigua de Gamonal, en la calle Vitoria.

Como explica el edil socialista «para poder desarrollar las nuevas edificaciones es necesario que los promotores urbanicen también la parte de Lavaderos y, de ahí, que se haya comenzado con el derribo de esta casa para poder urbanizar el aparcamiento».

Desde Urbanismo calculan que saldrán entre seis y ocho nuevas plazas de estacionamiento en esta superficie que es muy utilizada por los vecinos de la zona que carecen de aparcamientos subterráneos. Durante la demolición y la retirada de escombros, se ha vallado la zona y, por tanto, no es posible aparcar en los aledaños de la casa como se ve en la imagen que acompaña a esta información.

Este periódico ha podido charlar con Jesús García, de 83 años, que vivió en esa casa junto a su familia desde los 9 hasta los 24 años de edad. El burgalés recordaba que en aquellos tiempos eran cuatro vecinos los que compartían estancia en el inmueble que dice adiós definitivamente.

En los últimos tiempos la casa estaba 'okupada' por joven que el viernes estaba todavía recogiendo sus pertenencias ante el aviso de derribo y el vallado que se realizó de la propiedad.

Fuente: Correo de Burgos