¿En que se traduce la «paciencia» que pide el Ayuntamiento cuando tardan en pagar?

Uno de los educadores sociales de Saltando Charcos, Óscar Caballero de «paciencia» que recibe desde hace 8 meses del Ayuntamiento de Burgos. Y es que, tal y como ha denunciado el colectivo, se han visto obligados a cerrar las puertas tras la morosidad de un Ayuntamiento que, con cerca de mil empleados, es incapaz de pagar a tiempo los más de 40.000 euros.
Este jueves, a su paso por Canal 54, Caballero mostro su hartazgo ante las constantes peticiones de paciencia. Sobre todo porque esta paciencia se materializa, primero en tener que emplear dinero de otros sitios para pagar los 40.000 euros de los servicios a los que Saltando Charcos se comprometió con el Ayuntamiento; segundo, porque esa paciencia ha llevado a este trabajador a tener que estar varios meses sin cobrar ni tan si quiera su finiquito; tercer porque el efecto real es que la asociación ha tenido que cerrar sus puertas. Por suerte, no se ha llegado a un cuarto punto que sería endeudarse mediante un crédito para hacer frente a la deuda provocada por el impago municipal.
Esta es una situación a la que algunos colectivos se han visto obligados en el pasado, pero esconde una maldad, porque el Ayuntamiento no abona los intereses de dichos créditos. La única forma de intentar conseguir el abono de los intereses y posibles recargos por demora es acudir a la vía judicial. Una acción que tampoco es gratuita, ni sencilla, ni desde luego rápida, que en muchas ocasiones puede llegar a entrampar a la entidad.
Saltando Charcos ha convocado una renunión para este viernes por la tarde, en la plaza del Pueblo Antiguo de Gamonal, a las 18.00 horas, para explicar la situación a los usuarios del colectivo o a vecinos y escuchar alternativas o posibles soluciones al problema. balleros, ha explicado en primera persona qué significa la petición de «paciencia» que recibe desde hace 8 meses del Ayuntamiento de Burgos. Y es que, tal y como ha denunciado el colectivo, se han visto obligados a cerrar las puertas tras la morosidad de un Ayuntamiento que, con cerca de mil empleados, es incapaz de pagar a tiempo los más de 40.000 euros.
Este jueves, a su paso por Canal 54, Caballero mostro su hartazgo ante las constantes peticiones de paciencia. Sobre todo porque esta paciencia se materializa, primero en tener que emplear dinero de otros sitios para pagar los 40.000 euros de los servicios a los que Saltando Charcos se comprometió con el Ayuntamiento; segundo, porque esa paciencia ha llevado a este trabajador a tener que estar varios meses sin cobrar ni tan si quiera su finiquito; tercer porque el efecto real es que la asociación ha tenido que cerrar sus puertas. Por suerte, no se ha llegado a un cuarto punto que sería endeudarse mediante un crédito para hacer frente a la deuda provocada por el impago municipal.
Esta es una situación a la que algunos colectivos se han visto obligados en el pasado, pero esconde una maldad, porque el Ayuntamiento no abona los intereses de dichos créditos. La única forma de intentar conseguir el abono de los intereses y posibles recargos por demora es acudir a la vía judicial. Una acción que tampoco es gratuita, ni sencilla, ni desde luego rápida, que en muchas ocasiones puede llegar a entrampar a la entidad.
Saltando Charcos ha convocado una reunión para este viernes por la tarde, en la plaza del Pueblo Antiguo de Gamonal, a las 18.00 horas, para explicar la situación a los usuarios del colectivo o a vecinos y escuchar alternativas o posibles soluciones al problema.
Fuente:Canal54.es