jueves, 19 de marzo de 2020

ESPEREMOS NO LLEGAR A ESE ESCENARIO

Burgos se prepara para un escenario de 1.500 infectados por coronavirus, un 6% pacientes críticos

Burgos se prepara para un escenario de 1.500 infectados por coronavirus, un 6% pacientes críticos

Los médicos piden desterrar la idea de que los casos muy graves y de alta mortalidad son mayores con pluripatologías, pues la edad media en el HUBU está entre 55 y 65 años | El confinamiento es clave para romper la cadena de transmisión y «hay que aguantar el tirón»

El Hospital Universitario de Burgos (HUBU) se prepara para hacer frente a 1.500 infectados por coronavirus, de los cuales, el 6% entrarían en la categoría de pacientes críticos. Es el escenario «moderado» que maneja la dirección del centro hospitalario burgalés, en el que actualmente hay ingresadas 56 personas en planta y 22 en la UCI, «en estado muy grave».
El jefe de la Unidad de Cuidados Intensivos, José Antonio Fernández Ratero, ha explicado que si bien existen diferentes previsiones, viendo cómo evoluciona el virus a nivel internacional, «el escenario más razonable en Burgos es hablar de 1.500 positivos por coronavirus». De ellos, entre 90 y 120 serían pacientes críticos, que requerirían de ventilación mecánica, y pudiese darse el caso que todos al mismo tiempo.
Los pacientes de la UCI, según las experiencias en otros países, pueden requirir de su ingreso en la unidad de cuidados intensivos durante 28 días, ha explicado Fernández Ratero. De ahí que, en el pico más alto de la pandemia en Burgos, se puedan llegar a concentrar entre 60 y 80 pacientes graves, de alta mortalidad, en el HUBU. Así que ya se han tomado decisiones para hacer frente a esta eventualidad.
De entrada, desde el inicio de la crisis del coronavirus se ha ido habilitando espacio en la UCI para atender a los afectados más graves. Actualmente, los 22 ingresados ocupan prácticamente la totalidad de las tres salas de UCI del Hospital Universitario de Burgos, en concreto, 22 de los 26 puestos existentes. Y se va a echar mano de la Unidad de Recuperación Postanestésia (URPA), lo que permitiría llegar a 65 puestos de ventilación mecánica.
«Dignidad» para los pacientes mayores y atención en residencias
Los pacientes mayores merecen el mismo trato y la misma «dignidad» que cualquier otro paciente. Así lo ha recordado Luis Buzón, jefe de Medicina Interna del HUBU, quien ha defendido una atención de calidad para cualquier afectado de coronavirus, sea cual sea su edad o condición. Eso sí, hay que priorizar recursos.
Por ese motivo, el doctor Buzón apela a dotar a las residencias de mayores y centros asistenciales para personas dependientes o con discapacidad de médicos y enfermeros para que se realice allí, en las mismas instalación, una atención digna sin necesidad de tener que trasladar a los paciente sal HUBU, salvo que sea necesario por su gravedad.
El jefe de Medicina Intensiva ha recordado que estos lugares son espacios de más rápida propagación del virus, en los que los brotes suelen ser más difíciles de contener y afectan a personas con pronósticos, a priori, más complejos. Aun así, es preferible una atención en el lugar y que solo se trasladen al HUBU los casos estrictamente necesarios, que requieran de ingreso.
Aun así, las previsiones hacen necesario tener a disposición casi un centanar de ventiladores mecánicos y se podrá hacer, confirma el jefe de Cuidados Intensivos, sumando las máquinas que se encuentran en otros servicios hospitalarios o los recursos del Hospital Recoletas. También se ha pedido a la Junta de Castilla y Leñon 20 ventiladores mecánicos, para garantizar contar con equipos en el peor de los escenarios.
El doctor Fernández Ratero afirma que «se puede aguantar el tirón». La situación en seria, pues en diez días se ha pasado de no tener ningún ingreso en la UCI por coronavirus a tener 22, pero tampoco «dramática». Eso sí, ha lanzado un mensaje para que se destierre la idea de que los pacientes críticos, con alta mortalidad, son personas mayores y con pluripatologías.
En la UCI de Burgos, la media de edad de los ingresados está entre 55 y 65 años. De ahí la importancia de regular el flujo de ingreso de pacientes con COVID 19, para lo que se instalará en los exteriores del HUBU una carpa que 'cribará' a los usuarios con sintomatología compatible con el coronavirus (ingresando a los graves y mandado a su domicilio, en aislamiento, a los casos leves). Será un primer 'triaje', pero no un lugar para realizarse la prueba, insisten los médicos, ni una carpa medicalizada en la que se ingrese a pacientes.

Confinamiento «radical»

También es imprescindible que los ciudadanos cumplan a rajatabla con el confinamiento en sus domicilios. El jefe del servicio de Medicina Interna, Luis Buzón, ha insistido en que «todos somos víctimas» del coronavirus y «la clave» para superar la pandemia es el confinamiento, «que no es una medida casual».
Por ese motivo, el doctor Buzón ha hecho un llamamiento a la ciudadanía para que haga un confinamiento «radical». «Hay que aguantar el tirón», ha insistido, pues los resultados del confinamiento no se empezarán a notar hasta dentro de cuatro semanas. Entonces se verá que se ha cortado la cadena de transmisión. «Si la cadena no se rompe, no se podrá contener el coronavirus», ha afirmado.
Pese a todo, el jefe del Servicio de Medicina Interna ha dejado claro que «el hospital está preparado para hacer todo lo que esté en su mano» y ha destacado la importancia de ser «optimista» ante una situación así, pues se cuenta con grandes profesionales, «motivados» y con un buen hospital. Ningún centro sanitario se planifica para hacer frente a una pandemia de estas caraterísticas, pero el HUBU tiene capacidad para afrontarla.
De ahí también que haya reclamado contar con el material y los equipos de protección necesarios. Hasta ahora se han ido dosificando para garantizar la cobertura, frente a un mercado con el stock roto, pero es imprescindible tener bien protegido al personal sanitario. «Si caen ellos», si enferman los puestos no remplazables, la situación será «inmanejable», ha admitido.
Fuente: burgosconecta.com