viernes, 4 de diciembre de 2020

BURGOS LA UNICA CIUDAD SIN TERRAZAS

Los hosteleros de Burgos se hartan: «Nos están volviendo locos» 

La Junta no autoriza la utilización de las terrazas en la capital después de que el martes asegurara una reapertura general en toda la comunidad 

Estampa de las terrazas el día previo al cierre de la hostelería./AMC 

El caramelo envenenado al que hacía referencia el pasado miércoles el presidente de la federación de hosteleros de Burgos, Fernando de la Varga, sobre la reapertura de las terrazas en Castilla y León ya no es caramelo ni está envenenado. Directamente no existe para los hosteleros de la capital de Burgos. La Junta ha dado marcha atrás en la decisión tomada el martes de una reapertura general de las terrazas en Burgos y eso no ha sentado bien entre los propietarios de la capital.

 Antes no es que estuvieran descorchando champán ante la posibilidad de retomar la actividad, pero es que ese vaivén de decisiones siembra un mar de dudas entres los hosteleros. «Nos están volviendo locos», resume David González, del bar Acuarium. «A menos de 24 horas para retomar la actividad nos dicen que no podemos abrir. No lo entiendo. Aunque en mí caso no sea un problema, ya había previsto una compra de género más amplía para abordar estos días. Al ser bebidas, si no lo vendo ahora, lo haré más tarde. No me quiero imaginar cómo lo estará viviendo un restaurante con un producto con fecha de caducidad. Es todo una gran incongruencia», añade el hostelero burgalés.

Y todo esto para los negocios que tengan la opción de sacar sillas y mesas a la calle. Alrededor del 50% de los negocios hosteleros de la capital no disponen de espacio para servir en la vía pública. A éstos, estos cambios de criterios no les afectan, aunque seguirán sin ingresos hasta después del puente y sin una fecha cerrada.

Esta ampliación de las medidas ya las barruntaba el sector la noche previa al cierre de la hostelería, allá por el 5 de noviembre. El pesimismo inundaba el pensamiento de todos aquellos que echaban el candado para, en un principio, 15 días. Y los peores pronósticos se confirmaron y se alargaron las prohibiciones.

Ahora Burgos se encamina a liderar el cierre de la hostelería nacional. Ya lo hace en Castilla y León y de ser así podría superar al de otras comunidades como Cataluña, que cerró bares y restaurantes durante más de un mes.

De momento, el 'take awey' no salva negocios en Burgos.

Fuente: burgosconecta.com