El Pleno aprueba reestructurar la deuda del Desvío con la abstención del PSOE
La abstención del PSOE,
sumada a las de los concejales no adscritos y al voto de calidad del
alcalde, permite sacar adelante el convenio para reestructurar la deuda
del Consorcio
Imagina y Ciudadanos mantienen su voto en contra, afeando el cambio
de postura del PSOE, al que acusan de haberse plegado a los bancos
“Nuestra abstención no es
un voto de aprobación sino un voto de responsabilidad”. Con esta
sentencia, Daniel de la Rosa ha justificado esta mañana la abstención del Grupo Municipal Socialista en la aprobación del convenio
para la reestructuración de la deuda del Consorcio del Desvío
Ferroviario. Un acuerdo con CaixaBank, Ibercaja y Dexia Sabadell que ha salido adelante con el voto de calidad del alcalde, tras los votos en contra de Imagina y Ciudadanos y las abstenciones también de los concejales no adscritos, Silvia Álvarez de Eulate y Fernando Gómez.
El convenio, muy similar al rechazado en verano, reestructura la deuda de 167 millones que arrastra el Consorcio
De hecho, la abstención de Gómez ha facilitado la abstención de los socialistas,
cuyo posicionamiento no se ha conocido hasta el último momento. El PSOE
“no se ha abstenido por gusto, sino por responsabilidad ante una
probable situación de vulnerabilidad” en la que podría acabar el
Ayuntamiento, ha apuntado De la Rosa. Y es que el informe
de Jiménez-Blanco, “nos guste más o menos”, es muy claro: el Consorcio
del Desvío está en causa material de disolución y la deuda la asumiría
en solitario el Consistorio.
Por ese motivo, desde el PSOE se ha
asegurado que “les pesa demasiado” la responsabilidad y, para evitar que
la ciudad quede avocada a una “parálisis absoluta o intervenida por el
Ministerio de Hacienda”, se ha optado por la abstención para facilitar
el convenio. “No vamos a buscar ninguna rentabilidad política, ni haremos estrategia alguna”, ha insistido el portavoz, tras reiterar que la responsabilidad última de la situación actual la tiene el alcalde, que suscribió el acuerdo de 2014 en el que el Ayuntamiento aceptaba asumir la deuda si no se cumplían los acuerdos.
“Derrotados”
Ciudadanos e Imagina consideran que todavía había otras posibilidades sin explorar sobre la mesa
La postura del PSOE ha sido muy criticada por Ciudadanos e Imagina. Gloria Bañeres se ha preguntado dónde está el “duro” y “vehemente” Antonio Fernández Santos que defendía con argumentos el ‘no’ al convenio. “¿Se ha derrotado por el informe de Jiménez-Blanco?”, ha cuestionado la portavoz de C’s, “¿qué me estoy perdiendo?”. Y es que el convenio aprobado esta mañana es el mismo que el que se trajo al Pleno de julio, ya que las “mejoras” planteadas por las entidades financieras “no son tales”.
Ciudadanos considera que el acuerdo solo sirve para “prolongar la sangría” del Consorcio del Desvío
y critica que no se hayan estudiado alternativas como el concurso de
acreedores o la disolución, asumiendo la deuda con un plan
económico-financiero, que podría fin al problema. Además, Bañeres ha
recordado que el nuevo convenio incluye la posibilidad de que las
entidades financieras soliciten la disolución inmediata del Consorcio en
caso de incumplimiento y, sobre todo, tener que consultarles cada
modificación estatutaria.
Por su parte, Raúl Salinero ha acusado al Partido Popular de llevar a la ciudad a una situación “límite”,
planteando “el caos o algo malo”, que es el convenio. A su juicio, los
‘populares’ han mantenido una posición “entreguista” a las entidades
financieras. Además, el portavoz de Imagina ha insistido en que el
informe de Jiménez-Blanco “no ha valido la pena”, porque ha dicho lo que
ya se sabía, al tiempo que ha reiterado la necesidad de una comisión de investigación, que el PSOE no ha rechazado, más bien al contrario.
Lo menos malo
Paralelamente, los concejales no adscritos se han abstenido, asumiendo el convenio como el menor de los males. Silvia Álvarez de Eulate cree que la abstención es “lo que debía hacer” porque las consecuencias de no reestructurar la deuda son mucho más “perjudiciales”
para la ciudad. Por su parte, Fernando Gómez ha insistido en que las
fundaciones bancarias (Caja de Burgos y Cajacírculo) deberían tener una
responsabilidad mayor en el Consorcio y, si bien “no se ha hecho mal”,
considera que el acuerdo podría haber sido más beneficioso para el
Ayuntamiento y, sobre todo, haber conseguido un consenso político mayor.
Finalmente, el concejal de Hacienda y
máximo responsable de la negociación con las entidades bancarias,
Salvador de Foronda, ha vuelto a defender el “voto de responsabilidad”,
ya que la decisión sobre el Consorcio del Desvío “puede cambiar el
futuro de la ciudad”. A su juicio, este convenio es “la última
oportunidad que tenemos” para salvar la situación, ya que la alternativa
“trae más perjuicios que beneficios”. “Mi responsabilidad es
votar que sí porque formo parte del grupo político que asumió la
responsabilidad” cuando se aprobó la creación del Consorcio del Desvío,
ha insistido.
Fuente: BurgosConecta.es