viernes, 15 de marzo de 2013

EL RETRASO DEL PGOU ES CULPA DEL AYUNTAMIENTO

El retraso en el PGOU frena 90 millones en inversiones de Inbisa y El Corte Inglés

Á.M / Burgos - viernes, 15 de marzo de 2013
El gran complejo de la distribuidora y el parque de medianas superficies de la promotora vasca en Villafría están pendientes de que se apruebe el nuevo plan desde hace varios años
Anunciar un nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) en menos de cuatro años y no cumplirlo tiene consecuencias. La primera es que, transcurridos dos años desde su aprobación inicial, y en tanto en cuanto no se produzca la definitiva, ha vuelto a entrar en vigor el planeamiento anterior, que data del 99 y está colmado de modificaciones. La segunda, y quizás más importante, es que hay proyectos que, fiados a los plazos anunciados, se han enquistado negando a la ciudad inversiones multimillonarias que hoy serían oro molido para la economía local, tanto por el impacto de las obras como por la posterior generación de empleo.
Atendiendo solo a las grandes inversiones en materia comercial, hay dos proyectos cuya ejecución está pendiente única y exclusivamente de que se apruebe el nuevo documento. Se trata del complejo de El Corte Inglés en Parque Burgos y del parque comercial Inbisa, junto a Villafría.
En el primer caso, el gigante de la distribución no ha ocultado nunca que su principal obstáculo para acometer una inversión que será, como mínimo, de 70 millones de euros es la inexistencia del nuevo PGOU. Es más, tal era su confianza en que saliera adelante en plazos al menos aproximados a los prometidos, que solicitó la licencia comercial a la Junta y ésta ha expirado, circunstancia que con la nueva normativa europea no supondrá un problema, pero sí que demuestra que la cosa va con mucho retraso.

El Corte Inglés necesita que el nuevo planeamiento esté plenamente vigente porque erigir su gran complejo (El Corte Inglés, Hipercor y la franquicia de bricolaje Bricor) implica la obligatoria construcción de unos nuevos accesos que no están contemplados en el Plan del 99.
Su proyecto pasa por levantar un gran almacén de cinco plantas como elemento central, 3.302 plazas de aparcamiento (en cuatro sótanos y en superficie) y los mencionados centros de Hipercor y Bricor, que sustituirían al hipermercado actual. La creación de empleo, según ha sostenido en diversas ocasiones la propia cadena, es de 500 puestos de trabajo, a los que sumarían los 320 que tiene en la actualidad.

Inbisa
Algo similar ocurre en el caso del parque de medianas superficies proyectado por la firma vasca Inbisa en las inmediaciones de Villafría. Esta planificación arraiga en el año 2009. Tras promocionar 76 de las 209 naves industriales previstas en el parque que lleva el nombre de su promotora, se apreció una recesión en la demanda de este tipo de instalaciones debido a la por entonces creciente crisis económica.
Tras analizar el mercado en Burgos y su ámbito de influencia, se decidió apostar por un cambio de rumbo destinando los 46.000 metros cuadrados que quedaban por promocionar a construir un parque al estilo village; esto es, compuesto por varias medianas superficies. Es, en distinta medida, lo mismo que el Grupo Leal planificó en Villalonquéjar IV.
El

Se optó por la segunda por considerarla más rápida... El paso del tiempo ha puesto en solfa ese criterio, pero la firma, según ha podido constatar este periódico, continúa adelante con su parque aunque, eso sí, sobre una superficie de 22.000 metros cuadrados, la mitad de lo previsto en el 2009. Así lo ha ratificado al Ayuntamiento en los últimos días, donde se han mantenido contactos para interesarse por el avance del Plan. La inversión calculada por Inbisa es de 18 millones de euros y su repercusión sobre el empleo también sería notable.

¿Y bien?
Tras recibir en días pasado el informe de Patrimonio Cultural (regional) al PGOU, el Ayuntamiento dio por sentado que ya se habían culminado los trámites previos y que, incorporadas las peticiones de esos organismos sectoriales, podría procederse a la aprobación provisional del nuevo Plan. Eso permitiría remitirlo a la Junta de manera inmediata, donde ya se han estudiado varios avances y el compromiso es el de otorgar la aprobación definitiva en tres meses.
Sin embargo, además de Patrimonio Cultural faltaba alguien más. Concretamente dos más. Y exactamente Patrimonio Nacional y Demarcación de Carreteras. «Sí, se trata de dos informes muy importantes; el primero por lo que protege y el segundo porque afecta a carreteras y, por tanto, es crucial para proyectos como el de El Corte Inglés», reconoce el vicealcalde y concejal de Fomento, Ángel Ibáñez.
A partir de que esos informes lleguen, el Ayuntamiento necesitará «unas tres semanas» para aplicar al documento final las exigencias de unos y otros. Eso significa, reconoce Ibáñez, que «ya no llegaremos» a proceder a su aprobación provisional en el Pleno de abril.
De momento, hay que esperar a mayo. Y después a la Junta. Y mientras, decenas de millones de euros de dos grupos solventes esperan para aterrizar en una capital que no es inmune a la crisis económica y laboral.
 problema al que se enfrentaba Inbisa era la calificación del suelo. Lo previsto y aprobado allí eran naves industriales, así que solo había dos vías para lograr el cambio en la calificación del suelo. Una era la modificación del estudio de detalle de la parcela, la otra solicitar el cambio del uso del suelo en el nuevo Plan.
Fuente: Diario de Burgos

Aplicar las prescripciones de Patrimonio al PGOU

EL RETRASO en la aprobación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Burgos no debe de ser excusa, sino todo lo contrario, para que los responsables políticos de Urbanismo en el Ayuntamiento de la capital indiquen a los redactores del documento que se respeten las prescripciones de la Comisión de Patrimonio Cultural de Castilla y León. Primero por acelerar esa necesaria aprobación al cumplir con los requisitos exigidos y huir de vanas disputas; y, segundo, porque el fin de esa Comisión no es otro que la salvaguarda del conjunto patrimonial histórico de la ciudad que es uno de los potenciales para garantizar el mantenimiento del turismo cultural y la imagen de una ciudad que puede, y debe, presumir de un conjunto monumental como pocos en la geografía española.
Fuente: Correo de Burgos