viernes, 14 de abril de 2017

EL DESASTRE DE JAVIER LACALLE

El Ayuntamiento de Burgos o el Ejército de Pancho Villa

Descontrol, desorganización, sin coordinación, cada uno haciendo lo que quiere: al igual que pasaba en México con el ejército de José Doroteo Arango Arámbula (Pancho Villa) ocurre cien años después en el Ayuntamiento de Burgos comandado por Javier Lacalle Lacalle.

Es tal la falta de liderazgo popular que no sólo los Cuerpos Nacionales se les "han subido a la chepa de los políticos", sino que incluso cualquier Jefe de Servicio hace y deshace a su antojo sin que haya alguien del Equipo de Gobierno que le recrimine sus decisiones.
Los funcionarios y laborales ya no saben a quién obedecer: si a los políticos o a esos altos cargos que se han hecho con el control del ayuntamiento y donde han conseguido que no se mueva ni un solo papel sin su bendición.
Trabajadores que piden permiso para cuidar a sus padres muy enfermos y que no se lo conceden, vecinos que ven como sus escritos duermen el sueño de los justos, empresarios y autónomos a los que se les retrasan las licencias de apertura o de reforma de establecimientos, y ya lo último que este CONFIDENCIAL ha conocido: ni los propios concejales no liberados saben ahora cuando van a cobrar las compensaciones que reciben por el desempeño de su acción política, todo porque desde Tesorería han decidido, con la bendición del concejal de Hacienda que esos "emolumentos" los paguen desde cada Sección Municipal, es decir, por ejemplo, que las Comisiones de Bienestar Social se paguen desde Bienestar o las de Personal desde ese departamento y no como venía sucediendo desde siempre que era Tesorería quien pagaba, salvo en el caso de los Organismos Autónomos, aunque dependientes del Ayuntamiento como puede ser el Instituto Municipal de Cultura.
Y mientras pasa esto, la mitad de los concejales de vacaciones, empezando por el Alcalde que se ha ido a Málaga al, según nos dicen, tradicional  hermanamiento y a las procesiones con la Cofradía del Santo Cristo de la Sangre de Málaga, que por algo tanto el Ayuntamiento como la Diputación de Burgos son Hermanos Mayores.
Con este panorama más de uno/a lo que está deseando es que cuanto antes termine esta Legislatura para volver a su trabajo, mientras que otros que no tienen oficio ni beneficio confían en continuar, aun sabiendo que no pintan nada ni van a pintar en el Ayuntamiento de la capital burgalesa.
Fuente: BurgosNoticias.com