Andando Burgos: “El diseño del último tramo de la Ronda Interior margina al peatón”
Las primeras críticas al último tramo de la Ronda Interior de la
ciudad no han tardado en llegar. En este caso ha sido la Asociación
Andando Burgos la primera en pronunciarse, antes incluso de que el
alcalde de Burgos, Javier Lacalle haya inaugurado esta zona.
Y es que según apuntan desde el colectivo, la nueva conexión
permitirá, a priori, satisfacer las necesidades de los vehículos,
especialmente de los motorizados, que a través de este nuevo vial,
podrán bordear la ciudad sin penetrar en zonas céntricas. Sin embargo y
hasta el momento, según se deriva del uso del primer tramo abierto hace
unas semanas, no atiende con solvencia a las necesidades de los
viandantes, ni a lo largo de su recorrido, ni en las zonas aledañas.
A través de un comunicado de prensa Andando Burgos ha explicado
los motivos de estas críticas. En un primer lugar apuntan que el nuevo
tramo obliga a los peatones a realizar recorridos más largos de los
esperables y a superar, puntualmente, pendientes de excesiva
inclinación. Así plantean la posibilidad de complementar estos trayectos
con elementos de “pasamanos” para auxiliar al desplazamiento a pie.
Además explican que las zonas ajardinadas están “mal dispuestas”, porque interrumpen en muchas ocasiones la trayectoria peatonal, creando itinerarios truncados innecesariamente. Este hecho motiva que los viandantes tengan que buscar “alternativas lógicas de recorrido” para hacer las trayectorias más cortas y accesibles, a través del césped, y ponen el ejemplo del camino frente al edificio de I+D+I de la Universidad o junto al edificio de Las Rebolledas.
Además explican que las zonas ajardinadas están “mal dispuestas”, porque interrumpen en muchas ocasiones la trayectoria peatonal, creando itinerarios truncados innecesariamente. Este hecho motiva que los viandantes tengan que buscar “alternativas lógicas de recorrido” para hacer las trayectorias más cortas y accesibles, a través del césped, y ponen el ejemplo del camino frente al edificio de I+D+I de la Universidad o junto al edificio de Las Rebolledas.
Desde Andando Burgos también han recordado que a pesar de ser un
tramo recién inaugurado, ya se contemplan pequeños desperfectos en la
superficie del pavimento, que dificultan el trayecto de los peatones.
Además apuntan que hasta el momento, no hay arbolado ni mobiliario
urbano que complemente la calidad de la zona y mejore de los
desplazamientos a pie. Además dicen que durante buena parte del día, la
acera oriental es excesivamente sombría al estar situada en una cota más
baja que todo el vial y en concreto, por debajo de la vía ciclista que,
en su momento, debería haber sido proyectada de forma integrada en la
calzada.
Desde el colectivo recuerdan que cuando se habla de comunicar o
conectar “no se puede pensar solo en los coches”, e insisten en que no
se puede obviar que las infraestructuras “también deben servir para los
medios de transporte más sostenibles, especialmente la marcha a pie”,
algo que de momento no ocurre con este nuevo vial.
Fuente: Canal54.es