sábado, 30 de julio de 2011

MÁXIMA ALERTA EN LA SITUACIÓN ECÓNOMICA

Un estudio revela un ligero incremento del sector industrial y un “descalabro” de la construcción y el sector servicios en la provincia

Un estudio elaborado por el Colegio de Economistas de Burgos pone de manifiesto que la situación económica y empresarial de la provincia es de “máxima incertidumbre”, y que la situación no remontará “hasta que no se potencie la demanda interna”.
El presidente del Colegio de Economistas de Burgos, Carlos Alonso de Linaje, explicó que la pérdida de demanda interna por parte de los consumidores, a pesar de que se ha producido un ligero repunte de las exportaciones, es la causa de este empobrecimiento de la situación económica de la mayor parte de las empresas de la provincia, quienes se muestran “poco o nada optimistas” con los datos del último semestre.
En el primer semestre de 2011 se firmaron 51.198 contratos en la provincia, un ocho por ciento más que en el mismo periodo de 2010. La evolución de las contrataciones dependió de los sectores de actividad: en agricultura crecieron un diez por ciento (2.330) y en industria un 31,2 por ciento (5.905). A la baja fueron los empleados de la construcción, donde el número de contratos fue de 13.111 (un 11,9 por ciento menos), caso similar al del sector servicios, que concluyó con 88.895 contratos (un uno por ciento menos).
Según declaró Alonso de Linaje, estos datos ponen de relieve que “los rigores de la crisis se han acelerado más rápido en Burgos que en otros puntos de España en los últimos meses”, debido a que el número de afiliados a la Seguridad Social (146.324) se sitúa por debajo del mismo anterior (1,4 por ciento). “Este trimestre la situación está peor porque hay menos cotizantes”, recalcó el presidente del Colegio de Economistas.
Poco optimistas
La visión empresarial que desprende del estudio es “poco optimista”, ya que el comportamiento sólo resulta positivo en el sector industrial, que ha visto un ligero repunte en los últimos meses. En este sentido, los más afectados por la recesión siguen siendo los empleados del sector servicios que ven como el número de contratos disminuye debido a que el turismo “no acaba de hacer su efecto”.
El 61 por ciento de los empresarios consultados revela unas expectativas poco optimistas para el próximo semestre, ya que piensan que la situación “empeorará” y casi el 40 por ciento aboga por que se mantenga y no vaya a peor. Una de cada cuatro empresas consultadas asume una facturación hasta un 20 por ciento por debajo semestre anterior
Fuente: Norte de Castilla