Primero negamos la crisis, ahora negamos el rescate
El Ejecutivo desacreditó la exclusiva de Reuters como un rumor interesado
Ha preferido desmentir la evidencia del socorro de la UE para evitar el desgate
Hasta Guindos ha hablado de "apoyo financiero" para evitar la palabra "rescate"
La crisis ha unido a PP y PSOE en una curiosa coincidencia cuando
gobiernan. Si la economía va mal, es mejor negar los problemas. Y una
vez que la evidencia los deja al descubierto, se buscan eufemismos para
enmascararla. El anterior presidente, José Luis Rodríguez Zapatero, fue
casi el último en negar la crisis cuando la actividad caía en picado en
todas las economías occidentales, incluida la española. El equipo de su
sucesor, Mariano Rajoy, ha desmentido hasta última hora que su Gobierno
iba a solicitar a la UE de su sistema financiero, incluso a sabiendas de
que esa petición ya estaba en marcha.
A las 08.20 horas de ayer, viernes, la agencia Reuters lanzaba un
urgente en inglés en el que, bajo la etiqueta de exclusiva, afirmaba que
“España solicitaría este fin de semana ayuda para los bancos”.
La noticia, que saltaba las webs españolas una hora y media después,
citaba como fuente a dos altos funcionarios de la UE y una fuente
alemana. Daba una pista de su procedencia el hecho del que el reporte
fuera firmado desde Berlín por los periodistas Julien Toyer, Luke Baker y
Matthias Sobolewski.
Entre otros detalles, todos ellos confirmados posteriormente por los
hechos, la agencia aportaba que el anuncio se haría el sábado por la
tarde después de una conferencia de ministros de Finanzas de la zona
euro que se realizaría por videoconferencia.
Pese a todos esos detalles, una hora después el Ejecutivo , por boca
de un portavoz, calificaba de “especulación” la información publicada
por Reuters y se remitía a las declaraciones que este jueves realizó
Rajoy, en las que el presidente indicó que el Gobierno decidiría sobre
la ayuda al fondo europeo de rescate tras conocer el informe del Fondo
Monetario Internacional (FMI) y los encargados a los dos auditores
internacionales independientes.
Por si fuera poco, la agencia Bloomberg, la optra gran referencia de
los mercados financieros, confirmaba punto por punto a primera hora de
la tarde la noticia de Reuters. Eso no impidió que la vicepresidenta del
Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría,
en la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros, volviera a
desmentir que se fuera a celebrar una reunión formal del Eurogrupo este
sábado para tratar un eventual
rescate de la banca española. El Gobierno –dijo- se dedica a gobernar no a negar bulos sobre cifras o procedimientos. Algunos medios de comunicación y tertulianos afines al Gobierno se apuntaban a la teoría de la conspiración e inscribían la primicia periodística de Reuters como un rumor interesado para hacer caer la Bolsa española y dejar a las empresas españolas a merced de OPAS hostiles
rescate de la banca española. El Gobierno –dijo- se dedica a gobernar no a negar bulos sobre cifras o procedimientos. Algunos medios de comunicación y tertulianos afines al Gobierno se apuntaban a la teoría de la conspiración e inscribían la primicia periodística de Reuters como un rumor interesado para hacer caer la Bolsa española y dejar a las empresas españolas a merced de OPAS hostiles
Incluso esta mañana, después de que el FMI hiciera público anoche su
informe, la secretaria general del Partido Popular, María Dolores de
Cospedal, y en mayor medida, el ministro de Industria, José Manuel
Soria, negaban que el sistema financiero precisara de ayudas.
Los bulos han resultado ser ciertos,y la previsible batalla del
Gobierno será ahora por enmascarar la palabra rescate. Así ha sucedido
en cada una de las medidas que ha tomado, sobre todo subidas
impositivas, que negó hasta la saciedad que fuera a tomar durante la
campaña electoral o en los primeros meses de Gobierno. Así, a la
amnistía fiscal se le renombró como “una ley de regularización”; a la
reforma laboral “flexibilización de las condiciones para evitar el
despido”; a los recortes sanitarios “copago progresivo de los
medicamentos”; al aumento del IRPF “recargo temporal de solidaridad” y
al del IVA “subida de impuestos indirectos en términos hacendísticos”.
Con el rescate ha pasado lo mismo. El ministro de Economía, Luis de
Guindos, no ha tardado en acuñar un término para evitar la palabra
fatídica. "Apoyo financiero" y "préstamo en condiciones favorables para
la banca" son algunas de las expresiones que empleó Guindos para eludir
el vocablo rescate que está en los titulares de todos los diarios
extranjeros y en la mayoría de los nacionales.
Fuente: Diario El País