La ayuda se canalizaría a través del Fondo de Reestructuración, el FROB
Alemania prepara un rescate encubierto para España y Draghi prioriza una valoración "realista" de la banca
La canciller alemana Angela Merkel y su Gobierno
están urdiendo un plan de rescate encubierto para ayudar a la maltrecha
economía española. La partida, que no atendería a la misma fórmula que
se siguió con Irlanda, Grecia o Portugal, buscaría no dañar la imagen de
la eurozona en los mercados. Mientras, el presidente del BCE, Mario
Draghi, cree que antes de plantearse un rescate, España debe llevara a
cabo una valoración "realista" de la salud de su sistema bancario.
El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi,
recomendó este miércoles "basarse en valoraciones realistas de las
necesidades de recapitalización de los bancos", en relación a eventuales
peticiones para un rescate del sector financiero. "Cualquier decisión
sobre el Fondo Europeo de Estabilidad Financiera debe basarse en
valoraciones realistas de las necesidades de recapitalización de los
bancos y el dinero" de que dispongan los gobiernos "sin necesidad de
tener apoyo exterior", explicó Draghi en rueda de prensa.
Según el presidente del BCE, dicha valoración "debe ser realista,
basada en cifras y datos". Draghi subrayó que el BCE no empuja a ningún
gobierno a pedir ayuda de los fondos de rescate, sino que "es su propia
decisión".
Por su parte, Alemania ultima los detalles de un plan que permitiría a
España recapitalizar su sistema bancario con ayuda de sus socios
europeos, pero sin que la cuarta mayor economía de la eurozona tenga que
experimentar el bochorno de aplicar nuevas reformas impuestas desde el
exterior, según indicaron fuentes germanas.
A pesar de que Berlín se mantiene firmemente en contra de las
peticiones de España de utilizar los fondos de rescate para
recapitalizar directamente a sus bancos, los funcionarios indicaron que
si Madrid presentara una solicitud formal de ayuda podría recibir fondos
sin tener que someterse a un programa de rescate como los pactados con
Grecia, Irlanda y Portugal.
En vez de esto, España sólo tendría que llegar a un acuerdo sobre
las nuevas condiciones de la reforma del sector bancario. Asimismo,
Berlín estaría explorando la posibilidad de canalizar esta cualquier
posible ayuda a través del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria
(FROB) con el fin de reforzar el mensaje de que es en los bancos y no en
las cuentas públicas donde residen los problemas del país.
Con la inminente publicación de un informe del Fondo Monetario
Internacional (FMI) sobre los bancos españoles la próxima semana, los
funcionarios consultados apuntaron que todas las piezas están colocadas
para un inminente acuerdo de ayuda con Madrid, lo que podría suponer que
las ayudas estuvieran disponibles a principios de julio tras conocerse
la auditoría del sistema financiero realizada por Oliver Wyman y Roland
Berger.
"Uno podría imaginarse que las condiciones estarían centradas
principalmente en la banca, porque España ya ha acometido las otras
reformas", apuntó un funcionario bajo condición de anonimato.
En las últimas jornadas Europa ha asistido a una evolución en las
posiciones de Berlín hacia una postura más flexible, después de
respaldar la semana pasada la concesión a España de un año extra para
reducir el déficit hasta el 3% del PIB, algo que parece confirmar la
elaboración de este plan.
De hecho, la propia Merkel ha enviado en los últimos días el
mensaje de que está abierta a la posibilidad de una supervisión bancaria
a nivel europeo, aunque planteada como una opción a medio plazo, dentro
del proyecto de unión bancaria con el que Europa pretende romper el
cículo vicioso entre la banca y los emisores soberanos.
Fuente: El Imparcial