jueves, 10 de noviembre de 2011

RUBALCABA EN BURGOS

ELECCIONES 20-M

Rubalcaba anima a pelear por el escaño de Arnáiz y a defender los principios socialistas

El candidato a la presidencia del Gobierno llenó dos salas del polideportivo de Lavaderos
J. MAIQUES / L. B. / Burgos
Dosis de autoestima y confianza para luchar por el segundo diputado. El candidato del PSOE a la presidencia del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, consiguió reunir ayer a más de 2.500 burgaleses en el polideportivo de Lavaderos y en el primer mensaje que dirigió hacia un público entregado dejo bien claro la razón de su parada en Burgos en plena campaña: «Estamos aquí porque tenemos que pelear por el escaño de Marimar», en alusión a la número dos en la candidatura al Congreso, María del Mar Arnáiz.
El éxito de público, que hizo que fuera necesario habilitar una sala anexa para acoger a cerca de 1.000 personas, provocó que Rubalcaba hiciera un cambio de planes y se dirigiera a ese espacio antes de acudir al escenario del mitin. Allí, el candidato se subió a una caja y elevando el tono de voz (no había micrófono) se dirigió a los asistentes. «Os tengo que decir dos cosas: Primero, pediros disculpas porque no hayáis podido entrar y segundo, daros las gracias, de corazón, por el mejor mitin de toda la campaña».
Y de ahí, tras detenerse en una habitación en la que se reunió con los trabajadores de Metalibérica, Rubalcaba subió al escenario donde, tras los discursos de los representantes socialistas de Burgos y de Castilla y León, comenzó el discurso que quería trasladar a los votantes.
Lo primero, lo más importante, era convencer a los socialistas burgaleses de lo crucial que es en estas elecciones una provincia como Burgos. Puso en valor la importancia de ese diputado en liza y resaltó que la elección de Arnáiz es todavía «más importante porque es el escaño de una mujer. Y cuantas más, mejor», añadió con entusiasmo.
Luego fue el momento de hacer memoria y recordarles a los presentes los logros del PSOE en los últimos 30 años y también de los 130 de su dilatada historia. Aquí, el candidato hizo una defensa de los «valores y principios» del Partido Socialista, formación a la que comparó con un roble, «que aguanta porque tienen unas raíces muy sólidas y muy profundas», y a la que atribuyó las conquistas sociales más importante de la historia de España: sanidad y educación publica, y la creación del sistema de pensiones, en las que, por cierto, «estuvimos casi solos y, desde luego, sin el apoyo de la derecha».
En el mismo hilo, la otra parte del mensaje fue dirigida a alertar sobre las intenciones del Partido Popular si gana las elecciones. Descifrar ese programa oculto que pone en peligro la sanidad y la seguridad pública. Y para ello, el socialista señaló que el PP ya aplica estas medidas de recorte en las comunidades autónomas en las que gobierna.
Hubo tiempo para la autocrítica, para hablar del paro y para aportar propuestas. Señaló que los ajustes son demasiado rápidos y sostuvo que, sin crecimiento, la solución pasa por incentivar la creación de empleo con dinero público y pedir más esfuerzo a los que más tienen.
El candidato socialista se fue de Burgos como vino, entre gritos de presidente, presidente.
Fuente: Correo de Burgos