La encuesta electoral del CIS sale este miércoles
- La publicación del sondeo ha venido acompañada de una gran expectación, por cuanto dibujaría un terremoto en el mapa político en España
- El barómetro se realizó el mes pasado, coincidiendo con el estallido del 'escándalo de las tarjetas' de Caja Madrid y en plena crisis del ébola
Pablo Iglesias, el líder de Podemos. REUTERS | EP
Miércoles 5 de noviembre, a las doce y media de la mañana. Esa es la fecha y hora de la publicación del barómetro de octubre del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), muy comentado y muy esperado en los ambientes políticos y mediáticos en los últimos días, sobre todo por el terremoto en el mapa electoral que parece contener, en línea con la encuesta de Metroscopia para El País difundida el pasado domingo.
El sondeo del organismo público incluye una parte sobre opinión pública y política fiscal, las preguntas fijas habituales de los barómetros mensuales sobre la situación política y económica y la percepción ciudadana sobre sus problemas. Y, como confirma la nota de prensa remitida este martes, se suma "una parte variable que recoge la intención de voto, la valoración del Gobierno y de los líderes políticos". El CIS refleja cada año en sus barómetros de enero, abril, julio y octubre el mapa electoral.
A falta de conocer las fechas exactas de realización del estudio, se espera que el trabajo de campo del último sondeo se extendió en los primeros días de octubre, en la que se agolparon varias noticias que conmocionaron a la opinión pública y mermaron el crédito de los principales partidos y del Gobierno. Entre ellas, el ingreso de la primera persona contagiada en España del virus del Ébola, Teresa Romero, al que siguieron días de desconcierto y descoordinación en el Ejecutivo y en el Ministerio de Sanidad, hasta que la vicepresidenta asumió las riendas (el viernes 10, día que pudo quedar fuera del trabajo de campo), el estallido del escándalo de las tarjetas, de las que se beneficiaron consejeros de PP, PSOE, IU, sindicatos y patronal; la expulsión del líder sindicalista minero José Ángel Fernández Villa por haber regularizado 1,4 millones de euros con la amnistía fiscal, o los nuevos coletazos de presunta corrupción en el clan Pujol. A todo ello se sumó la dimisión de Alberto Ruiz-Gallardón como ministro de Justicia tras frustrarse la aprobación de la regresiva reforma de la Ley del Aborto.
Todo ello ha alimentado las especulaciones de que los resultados pueden ser terribles, sobre todo, para PSOE y PP, y muy buenos para Podemos, que podría convertirse en la primera fuerza en intención de voto –la respuesta espontánea dada por los espontáneos–. La formación de Pablo Iglesias ya lo es, tanto con cocina como sin ella, según el sondeo de El País.
Malos resultados desde julio
Socialistas y conservadores ya venían de un mal CIS de julio. En ese mes, ambos marcaron sus peores registros de los últimos años, con un 30% y un 20,2% de estimación de voto, respectivamente. Pero aquella encuesta se realizó antes de que se produjera el relevo de Alfredo Pérez Rubalcaba por Pedro Sánchez. En consecuencia, la encuesta que se haga pública mañana miércoles será la primera oficial que revele si ha habido o no efecto Sánchez.
Podemos se situó en julio como tercera fuerza política, con unaestimación de voto del 15,3%. Pero en intención de voto directa (11,9%) quedó en segundo lugar, tras el 12,8% del PP y antes del 10,6% del PSOE.
La enorme pujanza de la formación de Iglesias ha achicado el espacio de Izquierda Unida y UPyD (8,2% y 5,9% en julio), lo que demostraría que ambos no han sido capaces de convertirse en partidos refugio del descontento. En el último mes, la federación de Cayo Lara se lanzó a suproceso de convergencia –aún no concluido–, aunque sufrió en su pielel escándalo de las tarjetas, mientras que el partido de Rosa Díez vivió una de sus mayores crisis internas: destituyó a Francisco Sosa Wagner como portavoz en la Eurocámara y este acabó yéndose y rompiendo su carné de militante. También abrió el canal de negociación con Ciutadans, la fuerza dirigida por Albert Rivera.
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Fuente: InfoLibre
Pablo Iglesias, el líder de Podemos. REUTERS | EP
Miércoles 5 de noviembre, a las doce y media de la mañana. Esa es la fecha y hora de la publicación del barómetro de octubre del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), muy comentado y muy esperado en los ambientes políticos y mediáticos en los últimos días, sobre todo por el terremoto en el mapa electoral que parece contener, en línea con la encuesta de Metroscopia para El País difundida el pasado domingo.
El sondeo del organismo público incluye una parte sobre opinión pública y política fiscal, las preguntas fijas habituales de los barómetros mensuales sobre la situación política y económica y la percepción ciudadana sobre sus problemas. Y, como confirma la nota de prensa remitida este martes, se suma "una parte variable que recoge la intención de voto, la valoración del Gobierno y de los líderes políticos". El CIS refleja cada año en sus barómetros de enero, abril, julio y octubre el mapa electoral.
A falta de conocer las fechas exactas de realización del estudio, se espera que el trabajo de campo del último sondeo se extendió en los primeros días de octubre, en la que se agolparon varias noticias que conmocionaron a la opinión pública y mermaron el crédito de los principales partidos y del Gobierno. Entre ellas, el ingreso de la primera persona contagiada en España del virus del Ébola, Teresa Romero, al que siguieron días de desconcierto y descoordinación en el Ejecutivo y en el Ministerio de Sanidad, hasta que la vicepresidenta asumió las riendas (el viernes 10, día que pudo quedar fuera del trabajo de campo), el estallido del escándalo de las tarjetas, de las que se beneficiaron consejeros de PP, PSOE, IU, sindicatos y patronal; la expulsión del líder sindicalista minero José Ángel Fernández Villa por haber regularizado 1,4 millones de euros con la amnistía fiscal, o los nuevos coletazos de presunta corrupción en el clan Pujol. A todo ello se sumó la dimisión de Alberto Ruiz-Gallardón como ministro de Justicia tras frustrarse la aprobación de la regresiva reforma de la Ley del Aborto.
Todo ello ha alimentado las especulaciones de que los resultados pueden ser terribles, sobre todo, para PSOE y PP, y muy buenos para Podemos, que podría convertirse en la primera fuerza en intención de voto –la respuesta espontánea dada por los espontáneos–. La formación de Pablo Iglesias ya lo es, tanto con cocina como sin ella, según el sondeo de El País.
Malos resultados desde julio
Socialistas y conservadores ya venían de un mal CIS de julio. En ese mes, ambos marcaron sus peores registros de los últimos años, con un 30% y un 20,2% de estimación de voto, respectivamente. Pero aquella encuesta se realizó antes de que se produjera el relevo de Alfredo Pérez Rubalcaba por Pedro Sánchez. En consecuencia, la encuesta que se haga pública mañana miércoles será la primera oficial que revele si ha habido o no efecto Sánchez.
Podemos se situó en julio como tercera fuerza política, con unaestimación de voto del 15,3%. Pero en intención de voto directa (11,9%) quedó en segundo lugar, tras el 12,8% del PP y antes del 10,6% del PSOE.
La enorme pujanza de la formación de Iglesias ha achicado el espacio de Izquierda Unida y UPyD (8,2% y 5,9% en julio), lo que demostraría que ambos no han sido capaces de convertirse en partidos refugio del descontento. En el último mes, la federación de Cayo Lara se lanzó a suproceso de convergencia –aún no concluido–, aunque sufrió en su pielel escándalo de las tarjetas, mientras que el partido de Rosa Díez vivió una de sus mayores crisis internas: destituyó a Francisco Sosa Wagner como portavoz en la Eurocámara y este acabó yéndose y rompiendo su carné de militante. También abrió el canal de negociación con Ciutadans, la fuerza dirigida por Albert Rivera.
Fuente: InfoLibre