domingo, 18 de noviembre de 2018

YA VALE DE RECORTES

Aranda y Salas salen a la calle para exigir el fin de los recortes sanitarios

El hospital Santos Reyes pierde otros tres facultativos a lo largo del fin de semana

De un tiempo a esta parte, las concentraciones ciudadanas en la provincia de Burgos contra los recortes sanitarios se han convertido en una estampa habitual de los fines de semana. Ayer les tocaba el turno a dos comarcas afectadas por la pérdida de facultativos médicos sin que la Junta de Castilla y León se plantee su reposición. Como era de esperar, la manifestación convocada en Aranda de Duero a las 6 de la tarde congregó a miles de personas -en torno a 7.000 según los organizadores- que reivindicaron una «sanidad pública y de calidad» en la Ribera y la construcción del nuevo hospital que la ciudad lleva años esperando.
La marcha, convocada por las asociaciones vecinales, colectivos sanitarios y corrientes sindicales contó con el apoyo de todos los grupos políticos, inclusive el equipo de Gobierno del Partido Popular. No en vano, los organizadores denunciaron durante la concentración que el Ayuntamiento no les había facilitado una toma de luz suficiente para instalar la megafonía, por lo que tuvieron que recurrir a un bar cercano. Fue entonces cuando la alcaldesa, Raquel González, pidió intervenir para manifestar que no le constaba dicha solicitud. Sin embargo, lejos de calmar los ánimos, recibió una «sonora pitada» por parte de los manifestantes.
Entre los asistentes se encontraba el procurador de Ciudadanos en las Cortes regionales, José Ignacio Delgado, quien no dudó en señalar que la Junta está «poniendo en riesgo el mínimo servicio sanitario a la población» al no asumir un «mal estructural» que se traduce en la pérdida de especialistas y médicos de Atención Primaria por traslados o jubilaciones. En cuanto al nuevo hospital, criticó los «retrasos» y la enmienda de la formación naranja para inyectar otros 200.000 euros a un proyecto que corre «peligro» porque «no se están dando los pasos adecuados.
Entretanto, las bajas no cesan en el Santos Reyes. De poco ha servido incorporación de una segunda dermatóloga el jueves y la llegada, en enero, de una oncóloga y de dos oftalmólogas que han conseguido ya el visto bueno de Extranjería, así como de un nuevo profesional de Urgencias pendiente de firmar el contrato. El motivo, según ha podido saber este periódico, radica en la marcha del primer dermatólogo el 1 de diciembre y la pérdida, confirmada a lo largo de este fin de semana, de un internista y un ginecólogo.
Consciente de este déficit, el director médico del hospital, Evaristo Ruiz, plantea el desarrollo de un decreto para favorecer este tipo de servicios comarcales. Así, una vez aprobado el examen obligatorio se tendría en cuenta el baremo de méritos. «Un médico quiere plaza en propiedad y no ser interino. Si el tiempo computase el doble y hubiera una mayor rotación, con concursos de traslados periódicos, habría más movilidad y este tipo de hospitales saldrían reforzados», justifica convencido de que en este tipo de hospitales más pequeños es donde se más aprende porque «se ve de todo.
«Sobrecarga» laboral
Bajo la misma premisa, la plataforma Demanda Dignidad reunía ayer a última hora de la mañana en Salas de los Infantes a cerca de un millar de personas preocupadas por la reciente pérdida de una plaza médica y la reducción de las consultas semanales en su Zona Básica de Salud. Según el portavoz de la agrupación, Andrés Contreras,la amortización de dicha plaza conllevará la inevitable «sobrecarga» de los facultativos que prestan asistencia en 33 consultorios y 55 pueblos.
Ante una situación cada vez «más precaria» en una comarca con una población «envejecida» que en muchos casos sufre «pluripatologías» y que carece de medios de transporte, la plataforma no descarta la posibilidad de contactar con otras asociaciones de la provincia para organizar una concentración masiva en Burgos capital.
Fuente: Diario de Burgos