La Policía erradica la doble fila en calle Vitoria, Santiago y el entorno del disuasorio
I. Elices / Burgos - jueves, 12 de marzo de 2015
Más vigilancia. El Cuerpo estima que «el control ha de ser sistemático para afianzar objetivos». En Federico García Lorca se trabaja contra los infractores recalcitrantes
Hace pocos días la asociación Eras de Gamonal equiparaba la campaña de la Policía Local en el barrio contra la doble fila con «la caza de brujas». Farolas de algunas calles lucen carteles que advierten de la supuesta persecución de los agentes. Pero el área de Seguridad Ciudadana y el propio Cuerpo lo tienen claro. No hacen más que «cumplir con la legalidad» y, además, «paso a paso, sin entrar a saco» en los ‘usos y costumbres’ de los vecinos respecto al aparcamiento y con la disposición de periodos de información en los que las denuncias no entrañan sanción económica.
Un año después de que comenzara a extremarse la vigilancia sobre los vehículos mal estacionados, el Ayuntamiento considera erradicada la doble fila en tres lugares bien definidos, aunque la Policía advierte de que el «control sobre estas zonas ha de ser sistemático para consolidar objetivos». Estos espacios son el tramo de la calle Vitoria que discurre entre la glorieta de Juan Ramón Jiménez (McDonals) y el cruce con la avenida de la Constitución (edificio de Telefónica), la calle Santiago y las inmediaciones del párking disuasorio de las Torres (Severo Ochoa, Alfonso XI, Manuel Altolaguirre, etc).
En el último informe que ha elaborado la Policía de Barrio de Gamonal detalla las tareas que han llevado a cabo los agentes en esos lugares. Empezando por el final, era una evidencia que el control debía comenzar por las cercanías del disuasorio, pues la imagen de un aparcamiento vacío recién estrenado con las calles aledañas repletas de coches en doble fila no era la más adecuada. Los responsables del Cuerpo llevaron a cabo el pasado año charlas en el colegio Juan de Vallejo, en el instituto Pintor Luis Sáez, en las guarderías Pequeño Cid y Santa María la Mayor y en el conservatorio de música. El objetivo era informar a profesores y padres de que quedaba prohibido aparcar mal en las calles adyacentes -ni siquiera cinco minutos-, porque para eso estaba el nuevo párking. Los policías, además, han resuelto conflictos privados en la plaza interior de la calle Severo Ochoa, 12.
Sobre el control de la doble fila en la calle Santiago Apóstol, la Policía estima que el resultado es «óptimo». Y no solo en esa vía, sino también en algunas de las perpendiculares, como San Bruno, Canónigo Isidoro Díaz Murugarren y San Juan de Ortega. En este último caso ha sido esencial estrechar la calzada con aparcamientos en batería y su conversión en vía de único sentido.
Precisamente ayer la empresa concesionaria de pintar las marcas viarias en la capital señalizaba las paradas de bus y las zonas de carga y descarga en la calle Santiago, que fue reasfaltada en noviembre, algo que favorecerá la intervención policial.
En la calle Vitoria el objetivo también se ha alcanzado, tanto de la supresión de la doble fila como del uso irregular de las zonas de carga y descarga y de las paradas del autobús municipal. Para ello ha sido fundamental la habilitación de espacios restringidos para el reparto. En la mano de los números impares hay tres, uno frente a la antigua La Orensana, otro en Colchonerías Collantes y un tercero frente a Alimerka. En los pares hay dos, uno al lado de Reyca Decoración y otro junto al 139, frente a las casas de Juan XXIII.
En la calle Federico García Lorca el propósito por ahora no es terminar por completo con la doble fila. Los agentes controlan el estacionamiento inadecuado frente al Fernando de Rojas, cuya dirección solicitó que se garantizara espacio suficiente para que los escolares -algunos de ellos discapacitados- pudieran bajar y acceder al autobús de forma adecuada. En estos momentos los policías trabajan también para terminar con el estacionamiento habitual, sistemático y recalcitrante, con cierta permisividad a la hora de entrada y salida de alumnos, aunque lejos del acceso al colegio. El principal objetivo aquí en estos momentos es que se reduzca la doble fila en horarios de comercio.
En el resto de calles de Gamonal -Eladio Perlado, Francisco Grandmontagne, Luis Alberdi, Plaza de Roma, etc- los policías no han entrado a erradicar la doble fila. Por su cercanía a Federico García Lorca, Luis Alberdi es la siguiente vía del barrio donde la Policía Local comenzará a multar, pero por ahora no sucederá. Para ello, la sección de Tráfico tendrá primero que habilitar nuevas zonas de carga y descarga en la zona, así como nuevos espacios de aparcamiento, «lo cual demuestra que los agentes no están yendo a saco».
Pero en estos lugares lo que sí están haciendo los funcionarios policiales es eliminar el aparcamiento en las esquinas y en las proximidades de los pasos de cebra, prácticas que afectan de forma clara a la visibilidad de los conductores, con el consiguiente riesgo para los peatones.
Para intentar mejorar el tráfico en el barrio el Ayuntamiento no solo se ha esforzado en suprimir la doble fila, también ha efectuado reformas en algunas calles. Un claro ejemplo es Alfonso XI, que ahora es de un único sentido. Además, el establecimiento de estacionamientos en batería ha estrechado la calzada útil en otras vías, lo cual impide aparcar de forma inadecuada.
Fuente: Diario de Burgos
