Intervención ataja el plan de inversión con el superávit y exige reducir deuda
Á.M. / Burgos - miércoles, 11 de marzo de 2015
Lacalle tendrá que destinar al menos la misma cantidad a pagar créditos que a obras
El alcalde, Javier Lacalle, ha hecho en lo que va de año lo que no había hecho en toda la legislatura: comparecer dos veces junto al concejal de Hacienda, Salvador de Foronda, con apenas unas semanas de diferencia para hablar de la situación de las arcas municipales. Ya no hay 54 millones de facturas debajo de las alfombras, ni casos Espolón, ni periodos de pago a proveedores superiores a nueve meses... Ahora hay una estabilidad económica que ha permitido cerrar el ejercicio 2014 con un saldo positivo superior a los 19 millones de euros.
En ese contexto favorable sí habla el alcalde de la Hacienda local. La última vez que lo hizo fue hace una semana. Explicó entonces los grandes números de la liquidación de 2014 y avanzó que 10 de los 19,4 millones del ‘beneficio’ neto obtenido por el Ayuntamiento se destinarían a minorar deuda y a reforzar inversiones. Concretó que se reduciría la deuda corriente de la ciudad en «algo más de tres millones» a través de amortizaciones anticipadas, situando así la deuda con los bancos a finales de año en 99 ‘kilos’. El resto del dinero, «unos 6,5 millones», iría a parar a diferentes inversiones, entre las que citó las licitaciones de la Plaza Mayor, de la mejora de Capiscol o del parque de San Isidro.
Lo que no dijeron ni él ni De Foronda es que eso no lo permite la ley. Tal y como aclaró ayer la concejala socialista Carmen Hernando, atendiendo a las exigencias de «la Intervención municipal» la Ley obliga a utilizar el superávit para pagar, primero, las facturas sin contabilizar, cuyo importe total asciende a 2,4 millones; después, a facturas pendientes de abono y, en última instancia, «a inversiones, pero solo si se dedica una cantidad igual a amortizar deuda». Una cantidad igual. Esto es, no sirve pagar tres a los bancos y gastar seis en obras. O tres y tres, o seis y seis.
A más, Hernando también tumbó el argumento esgrimido por el regidor para dedicar la mitad de ese dinero reservado a inversiones (más de 3 millones) a «Vías Públicas porque lo obliga la Ley». «La Ley marca más de 20 programas en los que se puede invertir, y Vías Públicas únicamente es uno de ellos», aclaró.
Esas modificaciones se querían llevar al Pleno de este viernes, pero para eso los expedientes deberían haber estado a disposición de la oposición desde el jueves por la tarde y poder votarlos, ayer, en comisión informativa. Los recibieron el lunes, motivo por el que se solicitó que no se votaran las correspondientes modificaciones de crédito, algo que tuvo que ser aceptado por el PP, que ve así como será imposible llevar esta transfusión de dinero al Pleno del viernes y, por tanto, se retrasa la puesta a disposición de las diferentes concejalías de ese dinero, más allá de que se aclare cuál es la cuantía final que se usa para pagar deuda y cuál se puede dedicar a hacer obras.
Fuente: Diario de Burgos
