jueves, 5 de enero de 2017

ACUERDO DEL PP Y C´S EN EL AYUNTAMIENTO DE BURGOS

El PP acepta las exigencias de C’s, que “vigilará” su cumplimiento trimestralmente

El PP se compromete a revisar la postura municipal en torno a los consorcios del Desvío Ferroviario y Villalonquéjar y a constituir una comisión de investigación

Ciudadanos arranca casi 20 compromisos de diferente índole, pero descarta en todo caso entrar a formar parte del Equipo de Gobierno

Se analizará el cumplimiento de los acuerdos cada tres meses

 

El PP acepta las exigencias de C’s, que “vigilará” su cumplimiento trimestralmente
     El alcalde, Javier Lacalle, y la portavoz de Ciudadanos, Gloria Bañeres, firmaron el documento. GIT                              
Habemus acuerdo. Ahora, el Equipo de Gobierno tiene que cumplirlo. El alcalde de la ciudad, Javier Lacalle, y la portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento, Gloria Bañeres, han firmado a mediodía el documento de exigencias planteado por la formación naranja para evitar una posible reactivación de las negociaciones para una hipotética moción de censura. Un documento que, tal y como ha asegurado la propia Bañeres, apenas ha sufrido modificaciones más allá de algunas “matizaciones en la redacción” de algunos puntos, pero del que no ha desaparecido ninguna de las exigencias puestas sobre la mesa de inicio. Y no son pocas.
El PP ha aceptado todas las exigencias, aunque algunas han sido “matizadas” en su redacción
En total, se habla de casi una veintena de compromisos, entre los que se incluyen algunos ya adquiridos previamente y faltos de cumplimiento y otros novedosos. Y algunos, además, de especial relevancia para el devenir del Consistorio. Quizá, el compromiso de mayor trascendencia, por el volumen económico sobre el que influye, es el relacionado con los consorcios del desvío Ferroviario y Villalonquéjar. 
Finalmente, Ciudadanos ha arrancado un triple compromiso, que pasa en primer lugar por la creación de una mesa de análisis para estudiar las posibles “alternativas” que permitan “reducir la carga económica” de las deudas de ambos consorcios. A partir de ahí, se ha propuesto adaptar los estatutos de ambos organismos a la legalidad vigente y determinar con exactitud cuáles son las entidades consorciadas y la responsabilidad de cada una de ellas, amén del desarrollo de una comisión de investigación que analice las responsabilidades del proceso iniciado hace ahora 14 años. En principio, está previsto que dicha comisión se constituya durante la sesión plenaria que se celebrará el próximo 20 de enero.
Al margen de esos tres puntos, el documento plantea una significativa batería de compromisos que pasan por una ratificación del pacto antitransfuguismo que permita recuperar a Ciudadanos parte de la representatividad “perdida” en diferentes comisiones, una limitación de los mandatos municipales a dos legislaturas, la celebración de un debate sobre el estado de la ciudad o la convocatoria vespertina de algunas comisiones y sesiones plenarias. También se han formalizado compromisos para potenciar el emprendimiento, el desarrollo de los Presupuestos Participativos, la administración electrónica, el pequeño comercio o el Plan de Movilidad. Y todo ello con el compromiso añadido de no incrementar la carga fiscal durante lo que resta de legislatura y de subir las partidas de ayudas sociales vinculadas a los mayores y dependientes.

“Buen acuerdo”

A juicio de Lacalle, se trata de un “buen acuerdo” que redundará en beneficio de los burgaleses y permitirá mejorar la gobernabilidad de la ciudad, una idea compartida por Ciudadanos, cuya portavoz ha matizado parte del discurso que venía mostrando hasta ahora. Cierto es que “después de año y medio” de “incumplimientos” por parte del Equipo de Gobierno, se genera “desconfianza”, pero “los compromisos están para cumplirlos” y Bañeres “espera” que la actitud de Lacalle y sus compañeros de partido cambie con este acuerdo.
Para ello, los responsables de Ciudadanos se mantendrán “vigilantes”. De hecho, uno de los puntos concretos del acuerdo pasa por el desarrollo de un análisis trimestral del grado de cumplimiento de los acuerdos. En caso de que la formación naranja no esté satisfecha con la situación, deja la puerta abierta a la reactivación de negociaciones con el resto de grupos de la oposición.
Otra puerta que permanece abierta, al menos por parte del PP, es la que daría entrada a Ciudadanos en los órganos de gobierno municipales. Eso sí, por el momento, la formación naranja ni se lo plantea. “En ningún momento buscamos protagonismo. No pedimos ninguna silla. Además, se puede controlar la acción de gobierno desde la oposición”, ha subrayado Bañeres.

Críticas

En este sentido, la portavoz de la formación, que ha estampado su rúbrica en el documento acompañada del concejal Vicente Marañón y del responsable autonómico de Ciudadanos, Luis Fuentes, ha defendido la actuación desarrollada por su Grupo Municipal en toda esta historia, descartando cualquier acusación de “chantaje”. “El PP no estaba cumpliendo con lo comprometido” y “quisimos desatascar el bloqueo” buscando una mayoría con la oposición, pero “los órganos nacionales” del partido han decidido dar una nueva “oportunidad” a Lacalle y su equipo, ha reiterado Bañeres al tiempo que instaba al PP “tener este mismo criterio” en Villarcayo, donde está pendiente una moción de censura liderada por el PP en contra del alcalde de Ciudadanos.
Fuente: BurgosConecta.es