El personal de la BAC se pone en pie de guerra y fuerza una reunión con Lacalle
Los trabajadores protagonizaron ayer un parón de 15 minutos con el que exigieron a la tesorera que se les escuche
El programa informático sigue fallando, falta personal y se reclama el mantenimiento de los complementos salariales
Blasco asegura que hay un problema de organización interna y emplaza a los trabajadores a una mesa negociadora
El ambiente en la Oficina de Atención al Contribuyente está “caldeado”. La relación entre los compañeros es buena, pero muchos de ellos están “desmotivados”. Y es que el programa informático implantado hace casi un año, y por el que el Ayuntamiento pagó alrededor de 1,6 millones de euros, sigue dando muchos problemas. Los retrasos en la gestión de expedientes y operaciones se acumulan. Los trabajadores, tanto funcionarios como laborales, insisten en que no se les ha dado la formación comprometida. Y por si esto no fuera suficiente, alegan que falta personal, sobre todo de atención directa al público.
Así las cosas, y tras un verano relativamente tranquilo, el personal se ha vuelto a movilizar. Ayer por la mañana protagonizaban un parón de 15 minutos y una reunión con la tesorera, responsable última de la unidad. La protesta finalizaba tras conseguir un compromiso del alcalde, Javier Lacalle, de que se reunirá con ellos la próxima semana. El objetivo es que el Equipo de Gobierno tenga en cuenta sus reivindicaciones, que pasan por revisar el programa informático, recibir formación y mantener el complemento salarial concedido hace un año, si no se hace una valoración de los puestos para reconocer sus especificidades.
Falta de organización
Blasco recuerda que el Órgano de Gestión Tributaria está cubierto al 96%
La polémica llegaba a la Comisión de Personal que se celebraba a última hora de la mañana. Al margen de las cuestiones relativas al programa informático y la formación, que no son responsabilidad de Carolina Blasco, la concejal respondía a preguntas de la oposición y de los representantes de los trabajadores relativas a la escasez de personal y los pluses de productividad. Con respecto a la primera, Blasco ha insistido en que el problema de la BAC radica en los fallos en la organización de la plantilla, y no tanto en que falte personal.
Con datos en la mano, la concejal recuerda que 28 son los profesionales asignados a la oficina y 28 los puestos cubiertos. Otra cuestión es que sólo sean 17 las personas que están en atención directa al público, y que algunos servicios se paralicen porque uno de los trabajadores se va de vacaciones o coge una baja. La misma situación se da en todo el Órgano de Gestión Tributaria, bajo el que se amparan la BAC, Tributos. Tesorería, IBI, Inspección o Banco de Datos. El grado de cobertura de la RPT es del 96 por ciento, de los más altos de todo el Ayuntamiento, asegura Carolina Blasco.
Además, la concejal recuerda que se ha incrementado la plantilla con personal laboral a media jornada, se han pagado horas extras y se ha aplicado una política de flexibilidad total en moscosos, vacaciones y horarios laborales, precisamente para facilitar la puesta en marcha de la BAC. Sin embargo, sigue dando problemas, y de ahí deduce Blasco que no falta personal, sino que no se hace una gestión adecuada de los recursos humanos. Así las cosas, la concejal de Personal aboga por una transferencia de trabajadores de una secciones a otras, dentro del Órgano de Gestión Tributaria, para garantizar el funcionamiento de la BAC.
Mesa negociadora
Los sindicatos reclaman que se valoren los puestos de trabajo de la BAC
Por otra parte, la edil está dispuesta a llevar a la mesa general de laborales y funcionarios las reivindicaciones planteadas por los trabajadores. Carolina Blasco recuerda que el plus de productividad se concedió como una medida provisional, un incentivo, para el primer año de funcionamiento de la BAC. Sin embargo, Blasco está dispuesta a mantenerlo hasta que se analice el asunto en una mesa negociadora, en la que también se hablaría sobre la posibilidad de valorar los puestos de trabajo de la BAC, reconociendo sus especificidades, tal y como demandan los sindicatos.
Para los representantes de los trabajadores, meter al alcalde en la negociación no deja de ser un “parche”, puesto que lo importante es que el Ayuntamiento atienda sus reivindicaciones “de una forma estable y no temporal”. Y la solución, insisten los sindicatos, no es un acuerdo con fecha de caducidad, como el de hace un año, sino que debe pasar por valorar los puestos y reconocerles lo que supone trabajar en la BAC. De momento, funcionarios y laborales esperarán a ver qué sale de la reunión con Javier Lacalle y de la mesa negociadora, pero están dispuestos, aseguran, a seguir peleando.
Fuente: BurgoosConecta.es
