Impulso vecinal para peatonalizar la plaza de Lavaderos
También plantea una restricción del tráfico en uno de los lados de la calle Francisco Grandmontagne mientras trabaja en llegar a acuerdos con los aparcamientos en concesión para posibilitar la rotación
El cambio de imagen de
Gamonal no solo se quiere circunscribir a la calle Vitoria sino también a
dos zonas con gran densidad de población como son Francisco
Grandmontagne y la plaza de Lavaderos, que el actual equipo de Gobierno
quiere peatonalizar. En el primer caso se trata de una iniciativa que de
De la Rosa llevó en su programa electoral y que consultará con los
vecinos mientras que la segunda se ejecutaría a petición de los
residentes. «Varios vecinos de estas comunidades lo han pedido. Lo mismo
que se logró el consenso en Las Torres esperamos que se logre aquí».
El apoyo vecinal se ratificó con las palabras de una vecina, que le abordó cuando explicaba in situ su proyecto a este periódico. «Menos mal que un alcalde se interesa por esta plaza; esto es una vergüenza. Todas las zonas de alrededor están arregladas», exclamó.
La peatonalización en Francisco Grandmontagne se limitaría a la zona de la ‘almendra central’ y a la parte izquierda mientras que sí se permitirían los coches en la zona derecha para poder salir desde la calle Vitoria hacia la de Santiago. «Sería una zona de cohabitación de tráfico y peatones como existe en otras ciudades, de modo que se generaría una plaza comercial».
La actuación traería consigo la eliminación de medio centenar de plazas de aparcamiento pero se compensaría con el ofrecimiento de plazas en rotación o pagando un alquiler a precio competitivo en los aparcamientos de titularidad municipales en régimen de concesión que tienen plazas vacías como son los casos de Fátima, plaza de Roma y Francisco Grandmontagne.
Daniel de la Rosa ha mantenido contactos con las comunidades de arrendatarios que tienen esas plazas libres, la concesionaria original y las empresas que le sucedieron las han dejados en sus manos para ver si se puede firmar un convenio con ellas para que el Ayuntamiento se las pueda ofrecer a los vecinos que aparcan en la calle. También se ha planteado la posibilidad de que la administración local los pudiera gestionar en su totalidad. Otra opción pasaría por la posibilidad de ofrecer plazas en rotación, lo que entraña dificultades al ser necesario contar con accesibilidad para que los vehículos puedan entrar por un sitio y salir por otro y ubicar las cabinas de control.
En cuanto a la peatonalización de la plaza Lavaderos, De la Rosa está convencido de que se podría hacer de manera inmediata. «Si hay consenso se podría contemplar en el plan de actuaciones de este año aunque es consciente de que necesitará el respaldo a los presupuestos. «Es una isla ajardinada para aparcar coches, realmente no hay plaza, aquí si se peatonaliza se genera una plaza de verdad».
El apoyo vecinal se ratificó con las palabras de una vecina, que le abordó cuando explicaba in situ su proyecto a este periódico. «Menos mal que un alcalde se interesa por esta plaza; esto es una vergüenza. Todas las zonas de alrededor están arregladas», exclamó.
La peatonalización en Francisco Grandmontagne se limitaría a la zona de la ‘almendra central’ y a la parte izquierda mientras que sí se permitirían los coches en la zona derecha para poder salir desde la calle Vitoria hacia la de Santiago. «Sería una zona de cohabitación de tráfico y peatones como existe en otras ciudades, de modo que se generaría una plaza comercial».
La actuación traería consigo la eliminación de medio centenar de plazas de aparcamiento pero se compensaría con el ofrecimiento de plazas en rotación o pagando un alquiler a precio competitivo en los aparcamientos de titularidad municipales en régimen de concesión que tienen plazas vacías como son los casos de Fátima, plaza de Roma y Francisco Grandmontagne.
Daniel de la Rosa ha mantenido contactos con las comunidades de arrendatarios que tienen esas plazas libres, la concesionaria original y las empresas que le sucedieron las han dejados en sus manos para ver si se puede firmar un convenio con ellas para que el Ayuntamiento se las pueda ofrecer a los vecinos que aparcan en la calle. También se ha planteado la posibilidad de que la administración local los pudiera gestionar en su totalidad. Otra opción pasaría por la posibilidad de ofrecer plazas en rotación, lo que entraña dificultades al ser necesario contar con accesibilidad para que los vehículos puedan entrar por un sitio y salir por otro y ubicar las cabinas de control.
En cuanto a la peatonalización de la plaza Lavaderos, De la Rosa está convencido de que se podría hacer de manera inmediata. «Si hay consenso se podría contemplar en el plan de actuaciones de este año aunque es consciente de que necesitará el respaldo a los presupuestos. «Es una isla ajardinada para aparcar coches, realmente no hay plaza, aquí si se peatonaliza se genera una plaza de verdad».
Fuente: Diario de Burgos
