Los parados de más de 45 años son ya casi la mitad del total de desempleados
J.M. / Burgos - sábado, 27 de febrero de 2016
En 2010 representaban al 38% de las personas sin un puesto de trabajo. Hoy, de los 27.200 desocupados en la provincia de Burgos, 13.200 superan ya esa edad. Aunque ambos sexos sufren esta situación, las mujeres son las que peor lo tienen
Demasiado jóvenes para jubilarse y mayores para volver a incorporarse al mercado laboral. Ese el drama que viven buena parte de los 13.249 parados de Burgos que han cumplido ya los 45 años y a los que parece negárseles cualquier posibilidad de encontrar un puesto de trabajo. Los datos del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) muestran cómo este sector de población representa ya al 48,6% de los 27.225 desempleados de la provincia.
Hace apenas un lustro, en enero de 2010, el número de parados con más de 45 años en la provincia era de 9.524. Es decir, 3.700 menos que ahora. Pero lo que realmente muestra su dura realidad, ya que el desempleo ha afectado a todas las franjas de edad, es que han pasado de representar el 38,7% de los desocupados de la provincia a ser ya ese 48,6%. Es decir, casi 10 puntos más en un lustro.
Si se comparan los datos del último año (de enero de 2015 al mismo mes de 2016), los parados mayores de 45 años no han sido ajenos a la disminución generalizada del desempleo. Pero si entre el conjunto de la población ha descendido un 13%, entre los más veteranos lo ha hecho solo un 6,4%. Si bien es cierto que hay quienes, por la proximidad a la jubilación se han retirado del mercado laboral, no lo es menos la evidencia de que muchas empresas buscan a personas más jóvenes para incorporar a sus plantillas. Especialmente crítico ha sido para aquellas que han desarrollado su carrera profesional en la construcción y se han quedado sin opciones en un nicho de empleo cada vez más reducido.
Los datos muestran también que han sido las mujeres las que peor han salido paradas. Si ya no es baladí que el número de desempleados varones y mayores de 45 años haya crecido en el último lustro un 36% (de 4.426 a 6.051), entre las féminas de la misma franja de edad se ha disparado un 44,8% (de 4.968 a 7.198).
Hace apenas un lustro, en enero de 2010, el número de parados con más de 45 años en la provincia era de 9.524. Es decir, 3.700 menos que ahora. Pero lo que realmente muestra su dura realidad, ya que el desempleo ha afectado a todas las franjas de edad, es que han pasado de representar el 38,7% de los desocupados de la provincia a ser ya ese 48,6%. Es decir, casi 10 puntos más en un lustro.
Si se comparan los datos del último año (de enero de 2015 al mismo mes de 2016), los parados mayores de 45 años no han sido ajenos a la disminución generalizada del desempleo. Pero si entre el conjunto de la población ha descendido un 13%, entre los más veteranos lo ha hecho solo un 6,4%. Si bien es cierto que hay quienes, por la proximidad a la jubilación se han retirado del mercado laboral, no lo es menos la evidencia de que muchas empresas buscan a personas más jóvenes para incorporar a sus plantillas. Especialmente crítico ha sido para aquellas que han desarrollado su carrera profesional en la construcción y se han quedado sin opciones en un nicho de empleo cada vez más reducido.
Los datos muestran también que han sido las mujeres las que peor han salido paradas. Si ya no es baladí que el número de desempleados varones y mayores de 45 años haya crecido en el último lustro un 36% (de 4.426 a 6.051), entre las féminas de la misma franja de edad se ha disparado un 44,8% (de 4.968 a 7.198).
Fuente: Diario de Burgos