jueves, 6 de diciembre de 2018

LA JUNTA CREANDO PROBLEMAS

Kronospan para la fábrica de Salas por falta de madera

Serán 11 días y la multinacional asegura que la falta de subastas de materia prima por parte de la Junta le impide producir. Paraliza «sine die» las inversiones y recuerda que ya «se deslocalizó» un centro de Zamora por el mismo problema
Kronospan, la multinacional austríaca dedicada a la fabricación de tablero, detendrá a partir de este lunes y durante 11 días consecutivos su actividad productiva en la factoría de Salas de los Infantes. La compañía asegura que la decisión, lejos de estar prevista en su calendario, viene obligada por la «falta de madera disponible» y apunta directamente a la Junta de Castilla y León como la responsable de que no que haya materia prima y de que la planta, con más de 100 empleados, se vaya a tener que parar. Aunque la medida ya es drástica per se, lo más preocupante son las impredecibles consecuencias que podría tener que la situación se prolongue en el tiempo o que se siga repitiendo periódicamente.
La compañía defiende que «mantiene su apuesta por su fábrica de Salas, por la provincia y por la comarca de la Demanda», pero al mismo tiempo tampoco esconde otros mensajes menos tranquilizadores como el de que Kronospan ha tomado la determinación de «suspender sine die todas las inversiones previstas» en la factoría de Salas (las ordinarias suelen rondar los 5 millones de euros al año).
Pero lo que parece quizá más inquietante es que la compañía recuerde que ya tuvo que «deslocalizar su fábrica de Villabrázaro, en Zamora, por la escasez de madera». De momento no hay ningún mensaje explícito que apunte a que algo así pudiera suceder en Salas, pero la situación podría complicarse de persistir el problema.
Fuentes de la empresa insisten en que «la falta de madera en el mercado de manera continuada pone en peligro nuestras operaciones» y añade que la escasez de materia prima (pino) por la falta de subastas de la Junta, lo que provoca es que «los precios se incrementen notablemente, haciendo que la fábrica de Salas sea menos competitiva y que esté perdiendo numerosos pedidos en favor de las factorías del este de Europa».
El problema no se encuentra en la falta de madera susceptible de ser subastada. El propio consejero de Fomento y Medio Ambiente de la Junta, Juan Carlos Suárez Quiñones, ya prometió en febrero, en una visita a la fábrica de Burgos, poner más madera en el mercado procedente de montes de gestión pública. Se especificó entonces que no hay un problema de falta de materia prima ya que existe una política de repoblar toda aquella madera que se saca. ¿Y por qué entonces no hay pino suficiente? En Kronospan entienden que el problema es administrativo, de gestión.
La multinacional recriminó «la cantidad de madera que la Junta ha sacado a subasta en 2018 ha sido muy inferior a lo esperado. En concreto, entre enero y octubre 58.000 toneladas, cuando en 2017 se habían licitado 387.000».
La compañía detalló que ante esa situación, el 12 de noviembre, representantes de la Mesa Intersectorial de la Madera se reunieron  con el consejero de Fomento y  Medio Ambiente quien, nuevamente, se comprometió a sacar a subasta 630.000 metros cúbicos entre ese mismo mes y febrero de 2019. Sin embargo, la realidad es que «ya se han incumplido los primeros compromisos de subastas, algunas canceladas, y en noviembre sólo se licitaron 47.000».
La empresa detalló que necesitan «unas 627.000 toneladas» de madera y afirmó que, aunque «no todas ellas tienen que ser de la Junta (pueden proceder de montes privados o de ayuntamientos o de fuera de la región), ellos son el principal licitador. Y si no sacan lo que debe, es imposible llegar a esa cifra», defienden.
Prácticamente la única buena noticia de esta situación se encuentra en que el parón de 11 días en la actividad no tendrá una afectación significativa para la plantilla. La empresa entiende que los trabajadores rinden bien y no son responsables de lo sucedido, por lo que han descartado presentar un ERE. Durante estas jornadas se dedicarán a realizar, fundamentalmente, a labores de mantenimiento en las instalaciones.
Lejos de tener garantías de que no se van a producir más parones, la compañía «no descarta» que esta situación puede repetirse en 2019 y haya que volver a parar. En la factoría de Burgos capital no existe el problema ya que el grueso de la madera utilizada es reciclada.
SINDICATOS. El comité de empresa de Kronospan MDF no ocultó su «preocupación» por la situación y ratificaron que son testigos de que no llega madera a las instalaciones. Pese a ello, defendieron que «queremos ser optimistas» y pensar que la situación se va a revertir en las próximas semanas.
Fuente: Diario de Burgos