Burgos comprará a Madrid autobuses retirados para nutrir la decrépita flota
Á.M / Burgos - viernes, 02 de agosto de 2013
La EMT los saca a subasta en cuanto cumplen 11 años de servicio. Aquí los hay hasta con dos décadas de uso. Se pagarán entre 5.000 y 6.000 euros por cada uno de ellos. Se pretende adquirir en torno a media docena de coches
Era cuestión de tiempo y parece que ha llegado el momento en el que el Ayuntamiento deberá de comenzar a pensar muy en serio cómo dar salida a un problema latente en el seno del Servicio de Accesibilidad, Movilidad y Transporte (Samyt) desde hace años. Antes de eso, y para «ir tirando», hay que poner un parche que evidencia la decrepitud que está haciendo presa de la flota de buses municipales.
El esquema de la situación actual es el siguiente. De los 62 vehículos con los que cuenta el Samyt, 27 pertenecen a las empresas de la UTE que los tiene alquilados al Ayuntamiento por un sistema de renting que expira en 2016. Es decir, casi la mitad de la flota.
Todos los demás tienen una antigüedad superior a los diez años, habiéndolos con 14, 15 o incluso 19 años de servicio. Eso, por establecer un paralelismo, los convierte en ancianos de escaso rendimiento pero caro mantenimiento. Y además son poco fiables y comienzan a tener averías que difícilmente se pueden solventar con un coste razonable y en un plazo lógico.
El penúltimo ejemplo se vivió este miércoles, cuando un bus que circulaba por Plaza de España tuvo que ser desalojado de urgencia debido al incendio de su sistema eléctrico. La rápida actuación del chófer de la línea, que llegó a vaciar los dos extintores del coche sobre la zona en llamas, y la no menos ágil evacuación del vehículo impidieron que el susto fuera a mayores, puesto que fue necesaria la intervención de Bomberos para lograr sofocar el fuego, que ha arruinado el autobús.
Es una muestra que viene a acumularse a un largo historial de problemas. Por ejemplo, hay más de media docena de unidades que tienen estropeada la rampa automática que convierte los buses en un lugar accesible para todos los burgaleses. Arreglarlas requiere del envío de piezas que, sostienen en el Samyt, son caras y tardan en llegar, situando cada reparación en un coste cercano a los 7.000 euros.
el nuevo mapa. Pues bien, a esa situación sumen que la implantación del nuevo mapa del transporte público pactado por el PP y el PSOE obligará a tener en servicio un mínimo de 52 autobuses, quedando el resto para reforzar líneas, servicios especiales o cobertura de líneas cuando se sufra una avería o accidente, algo relativamente común para unos vehículos que recorren cientos de miles de kilómetros urbanos.
El propio presidente del Samyt, Esteban Rebollo, reconoce que «será necesario que los 62 vehículos estén en condiciones de funcionar y de hacerlo con ciertas garantías» para que no haya más sobresaltos de los que per se generará el cambio de rutas, frecuencias y paradas. Entonces, ¿cuál es la «solución transitoria»? Pues comprar autobuses de segunda mano a la Empresa Municipal de Transportes de Madrid (EMT).
La EMT retira sus autobuses en cuanto cumplen 11 años. Por norma. Huelga decir que la capital es la urbe más grande de España y las rutas que cubre cada coche suelen tener una distancia considerable. Una vez jubilados, los buses se ponen a la venta. Y esa es la operación que el Samyt quiere cerrar ahora para hacerse con «cinco o seis unidades», según confirma Rebollo.
De hecho, el concejal también reconoce que no es la primera vez que se intenta hacer. «Vimos otros que retiraron antes pero había más solicitudes de compra y no teníamos tiempo para disponer del presupuesto necesario», concreta. Ayer mismo se citó a los cuerpos nacionales (Intervención y Secretaría) a una reunión posterior a la Junta de Gobierno para tratar, precisamente, la elaboración de informes y la evacuación de crédito para poder llevar esta compra a un consejo extraordinario del Samyt que Rebollo pretende convocar en los próximos días con esta operación como único punto del orden del día.
También es inminente el envío del jefe de material y de un inspector de línea a Madrid para que informen sobre el estado de mantenimiento de los autobuses que se van a comprar, por los que se pagarán unos 5.000 ó 6.000 euros por unidad, según ha podido saber este periódico. «Cada vez que arreglamos una rampa nos cuesta más dinero y conforme nuestros coches se van haciendo más viejos nos resulta más difícil encontrar piezas de repuesto, así que creemos que salen baratos si nos garantizan el funcionamiento del transporte mientras mejora la situación económica», termina el edil de Movilidad.
En los últimos años el Samyt, a través de Rebollo, ha pedido al equipo de Gobierno que incluya partida presupuestaria para «ir adquiriendo cuatro o cinco autobuses, sobre todo con vistas al fin del contrato de renting», pero la respuesta ha sido negativa (cada vehículo cuesta aproximadamente 200.000 euros) y hoy los problemas son tan evidentes que la ciudad va a terminar comprando lo que otros retiran.
Como referencia, basta señalar que, en declaraciones a los medios en el mes de mayo, la EMT explicó que el destino de estos vehículos suele ser el garaje de un coleccionista, montar chiringuitos de playa (como lo oyen) o ser adquiridos por pequeños ayuntamientos de países como Ucrania. En un desguace pagarían unos 2.400 euros.
Fuente: Diario de Burgos
