Plantean prohibir estacionar en el lado derecho de la calle Juan XXIII
I.E. / Burgos - jueves, 19 de junio de 2014
El paso de vehículos de emergencia y de carga y descarga se complica debido a la estrechez de la calzada, 2,60 metros
Para contribuir a la mejora de la movilidad en Gamonal y Capiscol no solo es necesario crear nuevas zonas de aparcamiento y multar la doble fila, también se impone efectuar algunos cambios en la ordenación del tráfico y los estacionamientos de algunas calles. Así lo considera la Policía Local en su informe. Tras subrayar que la doble fila está siendo controlada con un resultado satisfactorio en la calle Vitoria tras el repintado de la línea roja que delimita la vía VAP, propone soluciones que mejoren la circulación en vías aledañas.
En la calle Juan XXIII, desde el lateral de la iglesia hasta la prolongación de la calle San Bruno se producen graves problemas de tráfico motivados por el estacionamiento en el margen derecho de dicha vía. El ancho de la calzada es de 6,35 metros, que se quedan en 2,60 para la circulación si se permite aparcar a ambos lados, tal como ocurre ahora. Como consecuencia del estrechamiento de la calzada los vehículos de emergencias tienen problemas para pasar y las furgonetas en ocasiones paran en mitad de la vía para cargar y descargar o bien lo hacen en las aceras. De hecho en alguna ocasión ha sido necesario movilizar grúas para retirar coches que imposibilitaban el acceso de camiones de bomberos. De ahí que Seguridad Ciudadana proponga limitar el aparcamiento a la parte izquierda de Juan XXIII y dejar el derecho para carga y descarga.
En la calle Lavaderos, de sentido único, la Policía Local también propone algunas modificaciones. Como suele ser habitual el estacionamiento en doble fila, propone en su informe cambiar el aparcamiento en línea por el de batería, a fin de suprimir la posibilidad de estacionar incorrectamente y aumentar las plazas. Se trataría de la misma transformación que está sufriendo en estos momentos la calle Vicente Aleixandre.
En la calle Barriada Inmaculada la Concejalía de Seguridad Ciudadana recomienda que pase a ser de sentido único en el tramo comprendido entre la calle Camino Casa de la Vega y el bloque F, en dirección a la calle Carmen Conde. Actualmente es de doble sentido y, debido a la existencia de estacionamientos en ambos lados de la calzada, es imposible que dos vehículos puedan cruzar la trayectoria sin apartarse para continuar la marcha.
En el tramo de la calle Vitoria comprendido entre la calle Pedro Alfaro y Juan Ramón Jiménez existe una vía de servicio donde el acceso, tránsito y estacionamiento de vehículos deben ser reordenados para mejorar su funcionalidad y accesibilidad.
En la calle Juan XXIII, desde el lateral de la iglesia hasta la prolongación de la calle San Bruno se producen graves problemas de tráfico motivados por el estacionamiento en el margen derecho de dicha vía. El ancho de la calzada es de 6,35 metros, que se quedan en 2,60 para la circulación si se permite aparcar a ambos lados, tal como ocurre ahora. Como consecuencia del estrechamiento de la calzada los vehículos de emergencias tienen problemas para pasar y las furgonetas en ocasiones paran en mitad de la vía para cargar y descargar o bien lo hacen en las aceras. De hecho en alguna ocasión ha sido necesario movilizar grúas para retirar coches que imposibilitaban el acceso de camiones de bomberos. De ahí que Seguridad Ciudadana proponga limitar el aparcamiento a la parte izquierda de Juan XXIII y dejar el derecho para carga y descarga.
En la calle Lavaderos, de sentido único, la Policía Local también propone algunas modificaciones. Como suele ser habitual el estacionamiento en doble fila, propone en su informe cambiar el aparcamiento en línea por el de batería, a fin de suprimir la posibilidad de estacionar incorrectamente y aumentar las plazas. Se trataría de la misma transformación que está sufriendo en estos momentos la calle Vicente Aleixandre.
En la calle Barriada Inmaculada la Concejalía de Seguridad Ciudadana recomienda que pase a ser de sentido único en el tramo comprendido entre la calle Camino Casa de la Vega y el bloque F, en dirección a la calle Carmen Conde. Actualmente es de doble sentido y, debido a la existencia de estacionamientos en ambos lados de la calzada, es imposible que dos vehículos puedan cruzar la trayectoria sin apartarse para continuar la marcha.
En el tramo de la calle Vitoria comprendido entre la calle Pedro Alfaro y Juan Ramón Jiménez existe una vía de servicio donde el acceso, tránsito y estacionamiento de vehículos deben ser reordenados para mejorar su funcionalidad y accesibilidad.
El Ayuntamiento estudia crear un párking de zona azul en el Silo
El Área de Seguridad Ciudadana lleva a cabo un informe en el que propone un estacionamiento de unas 70 plazas de rotación en la campa de Capiscol. La idea se enmarca en el plan para suprimir la doble fila en Gamonal
El Ayuntamiento y en concreto el área de Seguridad Ciudadana se han propuesto hacer de Gamonal y su radio de influencia una zona amable para el tráfico y para los peatones. El propósito último de suprimir la doble fila en todo el barrio -no solo en la calle Vitoria- pasa no solo por empezar a multar sino por crear las condiciones idóneas para que los usuarios de los coches encuentren otras alternativas a la de estacionar incorrectamente. De ahí que la Policía Local haya elaborado un completo informe con varias propuestas.
La creación de nuevas zonas de aparcamiento es una de las ideas. En este sentido aconsejan utilizar parte de la campa del Silo para construir un aparcamiento en rotación (de zona azul) para residentes y otros ciudadanos. Justifican su ejecución en la actividad comercial y la numerosa población existente en este espacio.
Este aparcamiento conllevaría, según describe el documento, una serie de beneficios como el de facilitar el estacionamiento a residentes y clientes de los comercios, la disminución de las infracciones en materia de tráfico y la reducción de la contaminación de los vehículos.
Dicho solar, según el Plan General de Ordenación Urbana, ocupa una parcela calificada como dotacional con categoría de equipamiento. Se podrían crear aquí en torno a 70 plazas, en la parte aneja al terreno que ocupa el colegio Fernando de Rojas.
El tipo de tarifa y horario de zona azul no tendría por qué ser el mismo que afecta a la zona centro. Las condiciones sobre su uso «podrían estudiarse con las partes implicadas a fin de determinar en qué franjas horarias sería de pago y en cuáles libre».
La Policía Local también propone otro aparcamiento de rotación -al que ya hizo referencia este periódico la semana pasada- en una parcela de 4.300 metros cuadrados situados en la calle Lavaderos, entre Doña Constanza y Centro. Allí habría sitio para unos 60 coches.
A estos dos aparcamientos hay que unir el disuasorio, que cuenta con 650 plazas totalmente gratuitos. Los dos estacionamientos en rotación que propone la Policía Local más este último darían cabida a muchos, si no todos, los vehículos que aparcan en doble fila en el barrio.
En todo caso la Policía Local pone en marcha cada día un dispositivo en torno al disuasorio para advertir a varios centros educativos de que tanto sus trabajadores como los usuarios (padres de los alumnos sobre todo) deben utilizar el estacionamiento recién construido y no aparcar irregularmente. La campaña informativa ha llegado hasta el instituto Pintor Luis Sáez, el colegio Juan de Vallejo, las guarderías Pequeño Cid y Santa María la Mayor, la academia de idiomas Red Castle, el centro de salud de Las Torres y, sobre todo, el Conservatorio.
Pero el Área de Seguridad Ciudadana considera que son necesarias otras medidas para crear el clima propicio antes de empezar con las multas.
Una de ellas es señalizar correctamente las paradas de autobús. En 2010 la Policía Local llevó a cabo un estudio en el que concluyó que la mitad de los apeaderos no están marcados con ningún tipo de indicación, lo que impide a los agentes sancionar a quienes estacionan en los mismos. Después de cuatro años no se ha llevado a cabo ninguna actuación tendente a corregir las deficiencias detectadas, solo se ha intervenido en algunas paradas de nueva creación. En 76 de ellas no hay ninguna señal vertical que prohíba el aparcamiento de coches y en 78 no hay ninguna línea en el suelo que indique que no se puede parar. Solo 10 tienen un panel informativo.
La creación de nuevas zonas de aparcamiento es una de las ideas. En este sentido aconsejan utilizar parte de la campa del Silo para construir un aparcamiento en rotación (de zona azul) para residentes y otros ciudadanos. Justifican su ejecución en la actividad comercial y la numerosa población existente en este espacio.
Este aparcamiento conllevaría, según describe el documento, una serie de beneficios como el de facilitar el estacionamiento a residentes y clientes de los comercios, la disminución de las infracciones en materia de tráfico y la reducción de la contaminación de los vehículos.
Dicho solar, según el Plan General de Ordenación Urbana, ocupa una parcela calificada como dotacional con categoría de equipamiento. Se podrían crear aquí en torno a 70 plazas, en la parte aneja al terreno que ocupa el colegio Fernando de Rojas.
El tipo de tarifa y horario de zona azul no tendría por qué ser el mismo que afecta a la zona centro. Las condiciones sobre su uso «podrían estudiarse con las partes implicadas a fin de determinar en qué franjas horarias sería de pago y en cuáles libre».
La Policía Local también propone otro aparcamiento de rotación -al que ya hizo referencia este periódico la semana pasada- en una parcela de 4.300 metros cuadrados situados en la calle Lavaderos, entre Doña Constanza y Centro. Allí habría sitio para unos 60 coches.
A estos dos aparcamientos hay que unir el disuasorio, que cuenta con 650 plazas totalmente gratuitos. Los dos estacionamientos en rotación que propone la Policía Local más este último darían cabida a muchos, si no todos, los vehículos que aparcan en doble fila en el barrio.
En todo caso la Policía Local pone en marcha cada día un dispositivo en torno al disuasorio para advertir a varios centros educativos de que tanto sus trabajadores como los usuarios (padres de los alumnos sobre todo) deben utilizar el estacionamiento recién construido y no aparcar irregularmente. La campaña informativa ha llegado hasta el instituto Pintor Luis Sáez, el colegio Juan de Vallejo, las guarderías Pequeño Cid y Santa María la Mayor, la academia de idiomas Red Castle, el centro de salud de Las Torres y, sobre todo, el Conservatorio.
Pero el Área de Seguridad Ciudadana considera que son necesarias otras medidas para crear el clima propicio antes de empezar con las multas.
Una de ellas es señalizar correctamente las paradas de autobús. En 2010 la Policía Local llevó a cabo un estudio en el que concluyó que la mitad de los apeaderos no están marcados con ningún tipo de indicación, lo que impide a los agentes sancionar a quienes estacionan en los mismos. Después de cuatro años no se ha llevado a cabo ninguna actuación tendente a corregir las deficiencias detectadas, solo se ha intervenido en algunas paradas de nueva creación. En 76 de ellas no hay ninguna señal vertical que prohíba el aparcamiento de coches y en 78 no hay ninguna línea en el suelo que indique que no se puede parar. Solo 10 tienen un panel informativo.
Fuente: Diario de Burgos