La nueva zona protegida por la Unesco opta a 576.000 euros para su promoción
C.M. / Burgos - jueves, 10 de julio de 2014
Capilla de la Catedral. Es solo una de la media docena de actuaciones que aspira a recibir las ayudas para bienes declarados Patrimonio Mundial, hasta el 75% del total
La ampliación de la protección del Patrimonio Mundial de Catedral a 78 hectáreas del centro histórico, aprobada por la Unesco en su asamblea del pasado mes de junio, empieza a tener sus ventajas. La primera de ellas es que la ciudad ha podido optar ‘in extremis’ a una línea de ayudas del Ministerio de Cultura para bienes con este marchamo, que incluye proyectos de conservación, protección y difusión.
El Ayuntamiento, a través de la Concejalía de Cultura y el Plan Estratégico, ha presentado media docena de actuaciones susceptibles de aspirar a estas ayudas por un importe de 576.000 euros.
En el ámbito de la conservación se aspira a lograr ayuda para rehabilitar la capilla de Santa Catalina de la Catedral a petición del Cabildo. Se da la circunstancia de que es la única que no contaba con financiación para su reforma. Este espacio fue la Sala Capitular hasta fines del siglo XVI y tiene una magnífica portada policromada con un descendimiento en el tímpano, además, en su interior guarda la galería de retratos de los obispos y arzobispos de Burgos. El coste de la intervención está presupuestado en 460.000 euros.
Por lo que se refiere a la edición de publicaciones, se ha presentado un proyecto para publicar un libro de fotografías del centro histórico de la ciudad, mientras que en el apartado de actuaciones para divulgar el Patrimonio Mundial está previsto realizar un ciclo de conciertos de órgano en la Catedral y en las iglesias de su entorno vinculado a la figura o a la época de Antonio de Cabezón. «Se cumplen en 2016 los 500 años de su fallecimiento y queremos iniciar ya algunas actuaciones para relanzar su figura y aprovechar para darle una vuelta a la Semana de Música que lleva su nombre», explicó el concejal de Cultura, Fernando Gómez.
También se ha incluido la señalización de toda la zona protegidas con el logotipo de Patrimonio Mundial. Abarca desde el monasterio de San Juan y la plaza de Santa Teresa por el este;el cerro del Castillo y la plaza de Castilla por el oeste;por San Esteban, San Gil y Capitanía, al norte y por el instituto Cardenal López de Mendoza, la plaza de Santa Teresa y el Museo de la Evolución Humana (MEH), al sur.
Realidad aumentada
La ciudad también aspira a lograr ayuda del Ministerio de Cultura para un proyecto de realidad aumentada que permitirá al visitante acceder a información de los diferentes lugares del centro y sus monumentos desde sus dispositivos móviles, teléfonos y tabletas. «Sería como un guía turístico personalizado. La idea es que el visitante se coloque delante de un lugar con su teléfono o tableta y tenga una explicación detallada».
Gómez apuntó que se ha incluido esta propuesta porque los técnicos del Ministerio de Cultura les aseguraron en la asamblea de la Unesco celebrada en Qatar que se quería fomentar la implantación de las nuevas tecnologías en los bienes declarados Patrimonio Mundial.
A la convocatoria de ayudas pueden concurrir las corporaciones locales en cuyo ámbito territorial haya bienes declarados Patrimonio Mundial. La cuantía no podrá exceder del 75% del coste total estimado. Un jurado técnico será el encargado de valorar los proyectos presentados y repartir la cuantía de 700.400 euros.
Fuente: Diario de Burgos
