Autobuses perdió 7,5 millones en 2013 pese a subir ingresos con menos usuarios
Á. M. / Burgos - martes, 29 de julio de 2014
Mejora Instalaciones Deportivas. El caso contrario es el de Deportes, que obtuvo más abonados que nunca, ató sus gastos y mantuvo el nivel de ingresos, cubriendo más del 50% de su coste
Un documento de 1.500 páginas no pasa inadvertido, por mucho que su lectura suene poco estimulante. Se aprobó a primera hora del viernes y la oposición puso el grito en el cielo por el escaso margen que tuvieron los grupos para analizar su contenido. Es la cuenta general del Ayuntamiento de Burgos y, en puridad, más que un informe en sí, es la suma de otros muchos. Así que respiren, que no les vamos a agasajar con su excitante contenido íntegro.
Uno de esos ‘informes’ integrados en la cuenta final de 2013 es la memoria justificativa del coste y rendimiento de los servicios públicos. Lo elabora el área de Intervención y en él se recoge el coste que tuvo para las arcas municipales la prestación de cada uno de esos servicios y el retorno económico que tuvieron. Más claro: cuánto cuestan y cuánto ingresan.
De esa contraposición se extrae el denominado ‘grado de cobertura’, que viene a indicar qué porcentaje del dinero destinado a esto o aquello no vuelve jamás. Es evidente que muchos de estos servicios no tienen una finalidad recaudadora y la consideración del beneficio que reportan se mide en términos estrictamente sociales, pero la radiografía sí permite ver cómo se gestionan, cómo evoluciona esta gestión y qué repercusión real tienen los incrementos vividos en años pasados en la mayoría de tasas y precios públicos.
Uno de los más mirados, y cuestionados, en los últimos años es el de Autobuses. Pues bien, según la memoria firmada por Intervención, en 2013 el Servicio dirigido por Esteban Rebollo costó 13,6 millones de euros y recuperó 6,1, generando un déficit irreparable de casi 7,5 millones, el peor dato de la serie histórica del servicio con la excepción de 2012, cuando las pérdidas superaron los 9 millones.
Lo curioso es que esto sucede a pesar de que los ingresos han pasado de 3,6 millones a 5,3, siendo todo el alza imputable, según el documento, a la venta de billetes y tarjetas monedero. Este incremento es todavía más notable si además se compara el numero de usuarios, que pasó de 13.378.096 en 2012 a 12.733.006 en 2013. Esto es: menos usuarios que pagan más y aún así fue el segundo año con mayores pérdidas, consolidando una tendencia que se acentúa desde la entrada en vigor del contrato de rénting de la flota. Tampoco cabe adjudicar el crecimiento del déficit al coste de personal, ya que en el año 2009, cuando se perdieron 5,8 millones, el personal costó 7,3, exactamente lo mismo que en 2013 con unas pérdidas de casi 2 millones más.
En la otra orilla
Sí se aprecia una mejoría notable en la gestión de Instalaciones Deportivas, siempre y cuando se mida en valores económicos. Al crecimiento continuo de abonados (53.539 en 2012 y 54.819 en 2013) que sitúa a Burgos como la segunda capital (detrás de Vitoria) con mayor número de ‘socios’ por habitante, se incorpora un mejor rendimiento de costes e ingresos.
Así, los costes se sitúan en 6,3 millones (1,1 menos que el año anterior) y los ingresos se mantienen en 3,2 millones, elevando el grado de cobertura del 43 al 51% y reduciendo el gasto de mantener la red de Deportes operativa desde los 41 euros por habitante y año a los 35. Este sí es, por tanto, un ejemplo claro de mejora de la eficiencia.
Otra política que ha tenido reflejo en el análisis es la relativa a las medidas de ahorro en el mantenimiento ordinario de la ciudad. En este caso hay servicios en los que no cabe retorno alguno (en el mantenimiento de parques, por ejemplo) y otros que sí están regulados por una tasa (basuras), pero a todos llegó la guadaña del concejal de Hacienda, Salvador de Foronda, y sus ya míticas renegociaciones de los contratos.
Por ejemplo, el mantenimiento de todas las zonas verdes de la ciudad costó en 2013 310.000 euros menos que en el ejercicio anterior, cerrando el desembolso total en 6.129.776 euros. En la recogida de basuras y la limpieza viaria se han bajado los costes en 200.000 euros y se han aumentado los ingresos en 600.000. Conclusión: hoy por hoy los ciudadanos cubren la totalidad del coste de este servicios (el grado de cobertura es del 99,25%).
También es un caso muy llamativo el del alumbrado público. Hoy cuesta recordarlo, pero en un par de meses los días menguarán como el algodón en agua caliente y se le prestará más atención a la iluminación pública. Y entonces volveremos a apreciar los efectos del plan de racionalización del alumbrado, que ha supuesto la desconexión o apagado temprano de casi 9.000 puntos de luz por toda la ciudad. Eso, además de sostenible, es rentable. En 2013 gastamos 5.771.528 euros en este servicio (incluye el mantenimiento), un millón de euros menos que en 2012. O cinco euros menos por cada burgalés, si lo prefieren.
Esta política también ha tenido efecto, por último, en el caso de la gestión del cementerio municipal de San José. La nueva adjudicación ha reducido los costes globales (de 1.285.443 euros a 1.133.467) y los ingresos por tasas y cesión de sepulturas son casi idénticos (1,1 millones), lo que eleva el grado de cobertura al 97%, muy cerca de que no le cueste un euro al Ayuntamiento. Claro que, estos casos, se cuentan con los dedos de una mano entre más de una veintena de servicios.
Fuente: Diario de Burgos
Fuente: Diario de Burgos
