La movilidad laboral a otras provincias crece un 8 por ciento en 2013
17.779 burgaleses encontraron trabajo en otras provincias a lo largo de 2013
El saldo de flujo interprovincial del mercado de trabajo sigue siendo negativo
Cada vez son más los que salen de Burgos a trabajar. GIT
El número de burgaleses que salieron de la provincia para trabajar se incrementó en 2013 en un 8,7 por ciento respecto al año anterior. Según los datos recogidos en el informe anual del Observatorio de las Ocupaciones del Servicio Público de Empleo Estatal, un total de 17.779 burgaleses tuvieron que trasladarse a otras provincias para trabajar, es decir, 1.438 más que en 2012, manteniendo así una tendencia alcista que se prolonga desde hace varios años.
Las condiciones laborales y la escasa oferta que parecen tener determinados sectores económicos, proclives por otra parte a la movilidad geográfica, provocó en 2013 que muchos burgaleses tuvieran que atravesar las fronteras de la provincia para encontrar trabajo. Sin duda, las opciones más habituales siguen siendo las provincias limítrofes, como Álava (4.363 contratos), Vizcaya (1.522 contratos) o Valladolid (1451 contratos). También destaca la presencia de Madrid en este apartado, ya que a pesar de no ser una provincia limítrofe, acogió en 2013 la firma de 2.483 contratos de ciudadanos cuyo domicilio se encuentra en Burgos.
13.510 personas de fuera de la provincia encontraron trabajo en Burgos
13.510 personas de fuera de la provincia encontraron trabajo en Burgos
Asimismo, también se ha incrementado la presencia de ciudadanos de otras provincias que se han trasladado hasta Burgos en 2013 para trabajar, si bien, el incremento en este apartado es casi anecdótico (0,8 por ciento). En total, el año pasado fueron 13.510 los contratos firmados en Burgos por ciudadanos empadronados en otras provincias. En este caso, la mayor parte de los ‘forasteros’ provinieron de Valladolid (2.230 contratos), Madrid (1.377 contratos) y Vizcaya (959 contratos).
Sin duda, la movilidad laboral está siendo una de las consecuencias directas de la crisis. Antes se focalizaba la búsqueda de empleo en el entorno más cercano al lugar de procedencia, mientras que ahora se intenta abrir el abanico en busca de la mejor oportunidad, ya sea dentro de las fronteras nacionales como fuera de ellas. Sin embargo, en ese ámbito, Burgos está perdiendo. No en vano, tras cruzar los datos de entradas y salidas, se observa cómo el saldo de flujos interprovinciales sigue siendo negativo y, lo que es peor, sigue aumentando. De hecho, esta tasa se incrementó un 44 por ciento en 2013.
Empelo y agricultura
Entrando de lleno en el estudio de los datos, también se observa una situación curiosa. Y es que, los principales sectores que registran flujos interprovinciales no son percisamente los que mayor peso específico tienen dentro del empleo o la economía. Así, un 20 por ciento de todos los burgaleses que salieron fuera de la provincia para trabajar lo hicieron en el sector de actividades relacionadas con el empleo (3.564 contratos), mientras otro 10,8 por ciento lo hizo dentro del sector agrícola (1.928 contratos).
En este sentido, la agricultura también es el principal motor de atracción de ciudadanos de otras provincias en materia laboral, ya que un 29,5 por ciento de los contratos firmados en 2013 por trabajadores de fuera de Burgos tuvo que ver con las actividades del campo (3.986 contratos).
Fuente: Burgosconecta.es
