El titular de la enfermería pide que se paralice la feria
B.D. / Burgos - jueves, 25 de junio de 2015
Urdiciáin presenta una denuncia en el Juzgado en la que solicita la suspensión de los toros ante la ausencia de una instalación médico-quirúrgica fija, que desapareció con las obras
El concesionario de la enfermería de la plaza de toros de Burgos, Jesús Urdiciáin, ha presentado una denuncia ante el Juzgado de Guardia en la que pide la suspensión cautelar de la celebración de la feria ante la ausencia de una instalación médico-quirúrgica fija.
En su escrito, Urdiciáin señala que la celebración de los espectáculos taurinos puede conllevar «la comisión de varios delitos contra la seguridad de las personas, además de otros como la falta de medios, que ponen en grave riesgo la integridad física de los intervinientes» en dichos festejos. Por ello, solicita al juez que suspenda la feria.
Las obras de remodelación de la plaza de toros han supuesto la desaparición del espacio que ocupaba hasta el pasado año la enfermería, dotación que era responsabilidad de Jesús Urdiciáin desde 2002 tras el acuerdo al que llegó con el Ayuntamiento. En ese contrato, el concesionario se comprometió a remodelar las dependencias sanitarias para adaptarlas a la normativa y a dotarlas del equipamiento y material médico necesario. Al comenzar las obras del coso, tal y como explica en su denuncia, retiró todo el material, que guardó en un local cercano a la plaza, porque «se me dijo desde el Ayuntamiento que una vez finalizada la remodelación podría volver a montar los equipos en la nueva enfermería».
Tras confirmar el alcalde que el Coliseum no dispondría de una nueva enfermería fija, Urdiciáin se dirigió a Instalaciones Deportivas para «solucionar el problema», si bien le indicaron -afirma- que «la enfermería era responsabilidad del empresario taurino».
Ayuntamiento y empresa han acordado la instalación de un camión-quirófano y una UVI móvil, hecho que ha contado con el visto bueno de la Junta. El remolque quirúrgico se conectará directamente con la puerta exterior de lo que era la enfermería.
Ante estos hechos, el denunciante considera que «la conducta mantenida por el Ayuntamiento y por el empresario Carlos Zúñiga representa un claro desprecio al cumplimiento de la Ley». Urdiciáin señala que la normativa establece que los espectáculos taurinos celebrados en plazas de toros permanentes deberán contar con servicios médico-quirúrgicos permanentes.
En su opinión, «la plaza de toros de Burgos es un coso permanente, según especifica el artículo 22 del Decreto 57/2008, de 21 de agosto, por el que se aprueba el Reglamento General Taurino de Castilla y León, y por ello debe contar con un servicio médico-quirúrgico permanente».
No opina lo mismo el delegado territorial de la Junta, Baudilio Fernández-Mardomingo, quien considera que el nuevo Coliseum es un recinto multiusos que acoge unos días al año festejos taurinos. «No es una plaza de toros permanente, por lo que la normativa permite la instalación de una enfermería móvil.
Fernández-Mardomingo señala que el camión-quirófano cuenta con el certificado del cirujano jefe del servicio médico del Coliseum, Manuel Aguado, tras constatar que reúne las condiciones que exige la normativa.
Fuente: Diario de Burgos