jueves, 28 de agosto de 2014

LOS GAMONALEROS EMPEZAMOS A ESTAR HARTOS

Las 'denuncias cero' llegan a Juan XXIII y prohíben aparcar en parte de la calle

Á.M. / Burgos - jueves, 28 de agosto de 2014
Los Bomberos han ido señalando las calles por las que no podrían circular sus vehículos y serán 'limpiadas' en uno de sus carriles. Por el momento no se tramitan las sanciones económicas

El método de la ‘denuncia cero’ ha llegado a Juan XXIII. Los vecinos de una de las áreas más pobladas de Gamonal se han encontrado esta semana con los establecimientos y portales ilustrados con una nueva modalidad de cartelería. Se trata de un aviso de Policía Local en el que se recoge que «por motivos de seguridad» se recuerda la «prohibición de estacionar en el margen derecho, en sentido de la marcha, en la barriada Juan XXIII entre los cruces con la calle Fátima y la calle San Bruno».
En el mismo cartel se concreta que el veto al estacionamiento obedece a la imposibilidad que tendrían los servicios de emergencias, especialmente los Bomberos, para circular por la calle en cuestión si tuvieran que atender una emergencia en el lugar. Esto choca con el uso consuetudinario que los residentes han dado a la calle durante años, ya que el aparcamiento es algo habitual a pesar de que se supone que está prohibido hacerlo por el motivo expuesto.
Para aclarar que la norma es tal, en los próximos días se procederá al pintado de amarillo de la margen derecha de la calle, pero no será ni la única ni la última. «Desde Bomberos hacen informes sobre todas las calles de la ciudad en las que existen problemas para que circulen los vehículos de emergencias. Esta es una de ellas, pero se ha esperado a que estuviera terminado el aparcamiento disuasorio de Las Torres para colocar los carteles de prohibido aparcar», explican fuentes municipales.
Efectivamente, en los avisos de Policía que hay distribuidos por el barrio «se recuerda la posibilidad de estacionar en el párking de Las Torres». Por si esto no surtiera el efecto deseado, también se ha activado el protocolo de denuncias, aunque con la particularidad de que, por el momento, no tendrán coste alguno para los dueños de los vehículos estacionados allí.
Esta práctica se inició en la plaza de San Bruno y posteriormente se extendió a la calle Vitoria. Durante los meses en los que la principal avenida de Gamonal estuvo parcialmente cortada al tráfico por las obras del frustrado bulevar, se hizo la vista gorda con la ocupación, a través del estacionamiento irregular, de la huella dejada por el desaparecido mercado.
Esa superficie está destinada a ser un espacio público y, una vez que se cerró la zanja abierta en la calle Vitoria, la Policía comenzó a denunciar a los propietarios de los coches. Lo hizo con ‘denuncias cero’, que no van firmadas ni se tramitan, aunque sí reflejan el motivo y constituyen una seria advertencia que, en ese caso, se podría materializar en 200 euros de sanción si las ‘recetas’ fueran firmes.

Nuevo escenario. Hubo colaboración vecinal y los coches abandonaron el centro de la plaza. Visto que en aquella ocasión no fue necesario emplear un sistema punitivo, la experiencia se repitió en el caso de la propia calle Vitoria, donde la línea roja que recuerda que se trata de una Vía de Atención Preferente (VAP) se repintó medio metro más cerca de la acera evitando así la legalización de facto que suponía su holgura tradicional.
En esta segunda ocasión fue necesario reforzar la ‘campaña’ con presencia policial para que el cumplimiento de la norma marcara tendencia. Hubo quejas, y no pocas, pero el Ejecutivo local defendió que, una vez culminado y en servicio el párking disuasorio de Las Torres, no existía motivo para permitir lo que en el resto de la ciudad se sanciona a diario.
Es ahora cuando se ha activado una suerte de ‘tercera fase’ que ya fue anunciada en su día por el concejal de Seguridad Ciudadana, Salvador de Foronda. «Por el momento no se va a entrar ni en Eladio Perlado ni en Juan XXIII», declaró el edil a este periódico en abril de este mismo año. Pues bien, parece que ha llegado ese momento y que, en esta ocasión, serán los servicios de emergencias los que dictaminen, vía informe, qué calles, confluencias, esquinas o pasos es necesario ‘limpiar’ de vehículos.