De Burgos a Sevilla ¿Nueva Fuente Ovejuna?
Por Francisco Vélez Nieto
Fuente Ovejuna es el drama de una justa venganza colectiva ante las atrocidades y abusos cometidos por Fernán Gómez, comendador de la Orden de Calatrava. De manera que no se asuste usted señor cacique del siglo XXI, pues se trata de vecinos pisoteados que tienen rota la garganta de tanto denunciar injustas situaciones. Tampoco deben de encresparse aquellos gobernantes fieles servidores de bancos de lujurioso mármol, de potentados ebrios de caudales, que han crecido en nuestra endeble y remendada democracia, convencidos de que todo el monte es orégano.
Y precisamente por tal motivo, los poderes fácticos y sus servidores se siente coléricos, ofendidos, ya que consideran toda la ciudad como un cortijo andaluz despóticamente familiar, propio, para hacer y deshacer, razón por la que se levanta todo un barrio de 60.000 almas, no muertas como aquellas sobre las que escribió Nicolás Gogol. Y es que según sus criterios los caciques especuladores se consideran dueños insaciable “Madre, yo al oro me humillo, / Él es mi amante y mi amado, / Pues de puro enamorado Anda continuo amarillo. / Que pues doblón o sencillo / Hace todo cuanto quiero, / Poderoso caballero / Es don Dinero”.
La Alameda de Hércules de Sevilla
Letrilla del inquieto Quevedo para coleccionistas de agradecimientos y oscuros repartos de sobres transportados por acólitos fieles mensajeros. Que no se me asusten, repito, los obsesos de lo “políticamente correcto” que no es el fantasma del comunismo, ni siquiera las barbas blancas de Carlos Marx. Quien por cierto dejó grabado esto de “A mayores beneficios para los de arriba, más estrecheces y pobreza para la clase media y clase trabajadora”, en esta sociedad nuestra dominada por caciques, cada día se palpa más opresión y explotación dada la avaricia insaciable de los de arriba. Y aquí D. Carlos Marx es tan actual como el Juan de Mairena de Antonio Machado.
Y, carambola, pues, puede ser Sevilla una Fuenteovejuna rebotada desde Burgos a la ciudad del Betis. Bien que lo ha comentado un alto mando policial: “Casi supone una invitación a radicarla en otras ciudades”. Y aparece Lope que señala: “No es juego aqueste, señor, y basta que tú lo mandes. ¿Quieres lugar? ¿Cómo vienes con tu belicoso alarde? ¿Naiste? Mas, ¿qué pregunto?” Versos previsivos de lo que puede significar una repetición como la de Gamonal, un rebote empecinado dedicado al señor alcalde hispalense, que intenta por segunda o tercera vez levantar toda la mítica Alameda de Hércules, cuna del mundo del toro, el cante y el baile, espacio lúdico, para construir un aparcamiento como el del populoso barrio de Burgos, en la zona álgida más popular de la Sevilla del cielo de Joaquín Romero Murube que perdimos, para benefició hipotético del exclusivo Centro de la ciudad, quien sabe si por sustancia para pocos y dolor de miles habitantes de una capital sometida a unos intereses creados, mientras familias y familias se desesperan porque lo prometido no les llega.
Fuente: Luz de Levante
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