martes, 27 de noviembre de 2012

ESTE AYUNTAMIENTO NO HABLA CON NADIE

La Policía Local reactiva las protestas tras romper la negociación con el Ayuntamiento
Los sindicatos calculan un ahorro de más de 100.00 euros en la aplicación de las 37,5 horas Al Consistorio le parece insuficiente porque las horas extra se mantienen
J. MAIQUES / Burgos
El Ayuntamiento y la Policía Local no pueden estar más alejados de llegar a un acuerdo en la aplicación de las 37,5 horas. Al menos esa fue la inequívoca sensación que se vivió ayer en una protesta muy ruidosa y tensa en la Casa Consistorial que los agentes llevaron hasta la misma puerta de la Alcaldía. La razón de fondo, a falta de una respuesta oficial, es que los concejales de Seguridad y Personal, Salvador de Foronda y Carolina Blasco no están dispuestos a aceptar el acuerdo pactado entre el intendente jefe, Fernando Sedano, y los delegados sindicales de SPPM, UGT y CSIF.
Para entender estas discrepancias conviene retrotraerse al decreto del Gobierno central que obligaba a todos los empleados públicos a trabajar 37,5 horas semanales en lugar de las 35 que estaban establecidas con anterioridad. Las negociaciones se sucedieron con los representantes de los trabajadores municipales (incluidos los organismos autónomos) y el incremento de la jornada en la totalidad de servicios era ya una realidad en el mes de septiembre. Salvo en el caso de la Policía, que llevaron las protestas por su cuenta, en donde el alcalde, Javier Lacalle, encomendó al intendente jefe que encabezara el diálogo una vez que las posturas para alcanzar el acuerdo eran muy distantes. Los sindicatos, por su parte, se comprometían a suspender cualquier acto de protesta.
Así las cosas, transcurre el tiempo y Sedano presenta a De Foronda, Blasco y Lacalle el acuerdo al que ha llegado con los sindicatos. Según explicaba ayer el representante de UGT en la Policía, lo pactado con el intendente jefe produciría a las arcas municipales un ahorro de más de 100.000 euros. Esta disminución de costes se produciría al percibir los agentes un 50% de lo que han cobrado en los últimos años por las horas extraordinarias trabajadas en las fiestas de San Pedro y Pablo. El otro 50% lo compensarían con horas.
Por su parte, el Ayuntamiento optó ayer por el silencio y prefirió emitir un comunicado avanzada la tarde. Este periódico lo intentó tanto con el concejal de Seguridad Ciudadana como con la edil de Personal y no obtuvo respuesta. No obstante, lo que sí ha trascendido es que en el equipo de Gobierno la propuesta de Sedano no ha gustado nada porque no produce el ahorro que se podía esperar. Ni de lejos.
Y es que, en la Casa Consistorial tienen el convencimiento de que la aplicación de las 37,5 horas debe servir para reducir las horas extraordinarias. Sin embargo, entienden que el calendario presentado se olvida deliberadamente de este propósito y se limita a crear solapamientos de agentes para cubrir con las 37,5 horas semanales. Lo que es lo mismo, que el agente que entre a sustituir a otro se incorpore al servicio media hora antes. Algo que en el equipo de Gobierno consideran inútil ya que no hace falta que haya más personas haciendo lo mismo de las que hay ahora.
Así las cosas, la situación llega al punto de que las posturas se mantienen igual o incluso más distantes que antes del verano. Y es entonces cuando los sindicatos piden reunirse con el alcalde, Javier Lacalle. Lo solicitan al entender que el regidor les había dicho que esto se iba a solucionar y que el interlocutor que había mandado (el intendente) había alcanzado un acuerdo y había que ejecutarlo.
Claro, que la realidad ha sido muy distinta y lo que se ha presentado a De Foronda y Blasco no ha gustado nada a los ediles. En cualquier caso, lo cierto es que el encuentro con el alcalde, tal y como explicó ayer uno de los agentes que se manifestó en el Consistorio, se produjo el pasado viernes. Y fue tal la distancia entre las partes que ya dijeron que no acudirían a la reunión que estaba prevista para ayer lunes. En otras palabras, que si no se aceptaba su propuesta no habría acuerdo. O todo, o nada.
Con todos estos antecedentes, cerca de un centenar de agentes se concentraron ayer a las puertas de la Casa Consistorial para expresar su enfado por la postura adoptada por el equipo de Gobierno. Hasta el punto de que dejaron la calle para entrar en el Ayuntamiento y llegar a las puertas de la Alcaldía. Ahí estaban reunidos, entre otros, el alcalde y el concejal de Seguridad Ciudadana, definiendo la propuesta del Plan de Nevadas con los altos cargos de la Policía Local. Pero no se cruzaron unos con otros.
Durante la más de media hora que estuvieron los manifestantes concentrados a la puerta del despacho de Lacalle, los agentes gritaban lemas del tipo «alcalde Pinocho, cumple tu palabra» o «alcalde da la cara». Todo ello intercalado con una versión bastante jocosa de un éxito del grupo M- Clan cuya letra iba dirigida a la concejal de Personal, Carolina Blasco: «Carolina, trátame bien, no te rías de mí, no me arranques la piel. Carolina, trátame bien o al final te tendré que comer».
Menos amistoso, que aunque pacífico fue intimidatorio, fue el inesperado encontronazo de la concejal de Personal en la calle con los manifestantes. Estos la siguieron durante varios metros hasta que la edil pudo librarse de su incómoda presencia. Antes también hubo un momento de ligera tensión cuando los manifestantes, sin oposición de los agentes que custodiaban una de las puertas de la Alcaldía, sobrepasaron la penúltima puerta que les separaba del alcalde. Afortunadamente, quedó en eso y se marcharon pacíficamente.
«Lo de hoy es solo un aviso»
El representante del Sindicato de la Policía, Jesús del Álamo, lanzó un mensaje a los responsables políticos del Ayuntamiento en el que advirtió que «lo que estáis viendo hoy (por ayer) es un aviso. A partir de aquí, quién sabe lo que puede venir. La gente está hablando de realizar medidas serias, drásticas, siempre dentro del marco de la Ley. Medidas que les hagan ver que esto no se hace. Que cuando un alcalde da su palabra tiene que cumplirla porque el es el primer trabajador municipal y ha de ser un ejemplo».
Y es que, el principal argumento de los sindicatos ha sido el de defender que el alcalde había delegado la negociación en el intendente jefe, Fernando Sedano. Algo que ha negado el regidor al afirmar que lo único que se le había pedido al número uno de la Policía era que presentara «una propuesta».
En este sentido, Del Álamo reprochó que «ahora nos digan que entendimos mal, que todo ha sido un sueño, que nadie dijo que podíamos negociar».
El equipo de Gobierno dice que está dispuesto a hablar
Avanzada la tarde de ayer, el Ayuntamiento dio su primera versión con una nota en la que recordaba que el pasado verano se dictó una resolución desde el Consistorio resolviendo la forma de aplicación de esas horas, algo que fue rechazado por los trabajadores. Posteriormente, el alcalde «aceptó el ofrecimiento» del intendente de la Policía para trasladar una «propuesta técnica entre los policías y sus mandos», que concluye, semanas después, con la presentación de la misma a las concejalías implicadas y su posterior estudio. No fue aceptada tal y como se planteó. El equipo de Gobierno entiende que «hay margen para llegar a un acuerdo entre la primera resolución y la reciente propuesta que se ha realizado ahora por parte de los trabajadores». En ese sentido, manifiesta que «continúa dispuesto a seguir negociando para buscar un punto de encuentro para el calendario del 2013». Todo eso, buscando siempre lo mejor para el interés general de los burgaleses y condiciones razonables para los trabajadores.
Fuente: Correo de Burgos