La parcela que se dio por el Peña Amaya se vendió después por 10,4 millones
Á.M / Burgos - sábado, 01 de diciembre de 2012
En marzo de 2006 el Ayuntamiento la permutó por el edificio y se tasó en 4,5 millones. Se vendió en julio de 2007 por el 130% más
Será un juez el que resuelva cómo termina un expediente municipal que
dura ya siete años, pero lo que se antoja evidente, a la luz de los
documentos citados ayer por el concejal socialista Antonio Fernández
Santos, es que la operación del Peña Amaya resultó «ruinosa» para los
intereses de la ciudad de Burgos.
Primero, porque tras ser declarada nula la permuta del colegio por un solar municipal en el que se pueden construir 73 viviendas, la empresa que se lo ‘colocó’ al Ayuntamiento se ha declarado insolvente para devolver el dinero, tal y como ordenaban las sentencias judiciales. Y, después, porque esa parcela se entregó a cambio de un edificio que sigue cerrado y que ni sirvió ni servirá nunca para el fin con que fue ‘adquirido’: albergue municipal.
Para más inri, el suelo por el que se cambió el inútil inmueble valía 15 meses después 10,4 millones de euros, y no los 4,5 en que se había valorado. Según los datos aportados por Fernández Santos, que leyó documentos registrales, el Ayuntamiento escrituró a su nombre el colegio el 17 de marzo de 2006 e Inizia, la empresa propietaria, hizo lo propio con una finca municipal edificable. Se tasó por entonces esa finca en 4,5 millones, entendiendo que eso era lo que costaba el Peña Amaya.
El 8 de enero de 2007, diez meses después, Inizia consiguió hipotecarla con Caja de Burgos por un valor de seis millones de euros. Y el 2 de julio de 2007, Anta (sociedad heredera de los títulos y derechos de Inizia) vendió a Urbelar la parcela por 10.483.062,68 euros. El 130% más de lo que el Ayuntamiento consideró que valía el suelo entregado menos de año y medio antes.
«Anta cobró el dinero y hoy la parcela es de Barclays», amplió el concejal socialista. El mencionado banco financió la operación a Urbelar, que actualmente se encuentra en concurso de acreedores. Por tanto, las cosas están así: Barclays es la dueña del suelo, Anta no puede pagar al Ayuntamiento lo que recibió por el Peña Amaya y la justicia dictaminó que la operación debe ser anulada y revertida. Pero eso ya no es posible.
Dación en pago
Ante ese panorama, el área de Fomento realizó unos informes que avalan la teoría de que únicamente aceptando el Peña Amaya en concepto de dación en pago y pidiendo la diferencia (el valor actual del colegio apenas alcanza los 3,5 millones) en dinero, se podría dar por cumplida la sentencia. Esto al PSOE le pareció «una barbaridad que pretende burlar de nuevo la legalidad» y por eso pidió a Secretaría General para que dictamine por escrito si eso es posible.
Del contenido de ese informe dijo el vicealcalde, Ángel Ibáñez, ayer que «se remitirá al juzgado para que nos comunique que no hay incoherencia (entre la dación en pago y el cumplimiento de sentencia)» y poder así aceptar esa operación con la intención de vender después el inmueble y tratar de recuperar al menos una parte de lo entregado.
Sin embargo, el PSOE hizo público ayer el contenido íntegro del informe y Secretaría General no puede ser más contundente en sus apreciaciones. Entre otras cosas, dice que «huelga entrar a valorar si la dación en pago que se plantea es o no la solución adecuada, máxime teniendo en cuenta que con la misma se llega al mismo resultado que con el convenio de permuta que quedó anulado por repetida sentencia». Esto es, que de dación en pago, nada.
Secretaría es quien advierte que debe ser el Juzgado el que determine qué hacer ahora, y recuerda que «el Ayuntamiento actúa, como parte vencida en juicio, sometido plenamente al control de los tribunales». Va para largo...
Fuente: Diario de Burgos