8 pueblos y 3 barrios de la capital piden que se acabe la ronda norte en otoño
C.M. / Burgos - jueves, 27 de febrero de 2014
La Plataforma BU-30 inicia una campaña de acciones con el lema "Belén y Javi somos todos"
Ocho localidades del alfoz, tres barrios de la capital y la Asociación de Empresarios de Villalonquéjar se han unido a la Plataforma BU-30 constituida hace una semana para pedir que las obras de esta carretera estén concluidas en otoño de 2014.
Bajo el lema ‘Belén y Javi somos todos’, la plataforma inicia a partir de hoy una campaña de acciones para exigir que la «reanudación activa e inmediata de las obras» y que se incremente la seguridad en el tramo provisional de la circunvalación que enlaza con la A-73, entre Villatoro y la salida del túnel por desdoblar. Fue precisamente en este tramo donde el pasado 14 de febrero una madre y su hijo, vecinos de Quintanadueñas, resultaron heridos graves tras chocar el vehículo en el que viajaban con un camión que invadió el carril contrario. «Vamos a pedir que durante el tiempo que duren las obras se establezca un mayor ancho de vía, se coloque una mediana de seguridad, se mejore la iluminación y la señalización y se aplique un firme antideslizante», apuntó Eduardo Cámara, uno de los portavoces de la Plataforma.
La primera acción que se llevará a cabo será una recogida masiva de firmas por la ciudad y los pueblos del alfoz que enviarán al subdelegado del Gobierno, José María Arribas para expresarle su malestar con la situación en la que se encuentra el tramo noroeste de la BU-30 y que está produciendo numerosos accidentes de tráfico.
Hasta el momento se han sumado a la plataforma las localidades de Quintanadueñas, Arroyal, Páramo de Arroyo, Quintanilla Vivar, Sotopalacios, Sotragero, Villarmero y Vivar del Cid y los barrios burgaleses de Villatoro, SanCristóbal y Villímar.
Vecinos de todas estas zonas utilizan ese vial en sus desplazamientos diarios desde casa al trabajo y saben del riesgo que supone circular por esa zona de obras, con un firme muy resbaladizo y por la que pasan numerosos camiones.
Recientemente se han colocado bandas reductoras señalizadas con pintura amarilla para advertir a los automovilistas, aunque desde la Plataforma no los consideran demasiado útiles. «Es una medida que se queda corta. Obliga a ralentizar el tráfico y a frenar a los vehículos. Hay que incrementar la seguridad, especialmente por la noche», añadió Cámara.
Fuente: Diario de Burgos