sábado, 3 de octubre de 2015

ARRIBAS CONDENADO

Arribas y 3 consejeros de Indasa, condenados por concurso culpable


P.C.P. / Burgos - sábado, 3 de octubre de 2015
La sentencia de la Audiencia confirma irregularidades en la contabilidad y conlleva su inhabilitación durante 4 años para la administración de bienes y representación de personas
Cuatro miembros del consejo de administración de Indasa, con su presidente José María Arribas a la cabeza, han sido condenados por el concurso culpable de la industria dedicada al curtido de pieles.La sentencia, dictada por el Juzgado de lo Mercantil y confirmada en lo fundamental por la Audiencia Provincial, les considera responsables de irregularidades en la contabilidad y del retraso en la solicitud de la declaración de la suspensión de pagos, que calculan agravó la insolvencia de la empresa en 1,45 millones de euros. Además, supone su inhabilitación durante 4 años para administrar bienes y/o representar personas.
La condena supone también responder de esos 1,45 millones, por «suponérseles conocedores de la situación patrimonial de la empresa» aunque no en la misma proporción. A Arribas se le hace responsable en solitario de la mitad de esa cantidad, dada su condición de presidente de Indasa y «su especial relación con las entidades de crédito de la ciudad», ya que fue presidente de Caja de Burgos hasta mayo de 2011. Los otros 725.368 euros se reparten entre el secretario y los 2 consejeros. Tras el fallo en segunda instancia, solo cabe recurrir en casación ante elSupremo.
Según la resolución, Industrias del Arlanzón S.A., dedicada a la fabricación y venta de calzado, tuvo un buen comportamiento hasta 2005, año en el que las ventas decrecieron.A partir de entonces, «el beneficio bruto de la sociedad ha sido negativo» y ha sobrevivido gracias a la financiación ajena, que «era más de 30 veces superior a la propia», detallan los informes financieros. Su contabilidad reflejaba en 2010 unas pérdidas acumuladas de 8 millones y unas deudas con entidades de crédito de 17,7 millones en febrero de 2011. De ellos, 12,4 millones correspondían a Caja de Burgos en préstamos y pólizas de descuento, «lo que significaba el 70% de la deuda financiera», subraya la sentencia.  
Indasa comunicó al Juzgado de lo Mercantil en marzo de 2011 que estaba en negociaciones con su acreedores, por lo que disponía 3 meses de plazo para solicitar el concurso.Sin embargo, no lo hizo hasta marzo de 2012, según denunció la administración concursal, que además fundamentó su demanda en diversas irregularidades en la contabilidad. 
De ellas, los tribunales consideran probado que hubo una sobrevaloración de las existencias para equilibrar el balance, según la auditora con un exceso de 6,7 millones de euros, lo que impedía  conocer la situación real de la empresa.Rechazan, sin embargo, la pretensión del administrador concursal de considerar como irregularidad la inclusión en el pasivo de una deuda financiera por descuento de facturas a clientes. «Indasa descontaba la práctica totalidad de las facturas, es de suponer que utilizando la línea de descuento que tenía con Caja de Burgos», práctica cuya «bondad puede discutirse», afirman los magistrados, pero que no es irregular.
Lo mismo sucede con los créditos de dudoso cobro a empresas participadas, concretamente uno de 1,33 millones a Mare Nostrum. «No hay irregularidad contable, ya que las cuentas anuales hacen referencia a este crédito presentándolo como incobrable», concluye
Fuente: Diario de Burgos