Lacalle perdería su mayoría absoluta y dependería de C’s para seguir gobernando
El Partido Popular pasaría de 15 a 13 concejales, mientras que la formación de Albert Rivera debutaría en Burgos con 5 ediles
Se acabó la tranquilidad de la que ha gozado en los últimos cuatro años Javier Lacalle en el Ayuntamiento de Burgos. La plácida era del bipartidismo con el PP y el PSOE como principales actores de la política local empieza a verse amenazada. A partir de ahora irrumpe un nuevo púgil en el cuadrilátero de la política local, con tanta fuerza como para llevarse por delante a UPyD y dar un buen mordisco de los votos de populares y socialistas mientras frena el avance del populismo social de izquierdas que representa Imagina Burgos.
La encuesta realizada para EL CORREO DE BURGOS por Celeste-Tel anticipa una foto fija de la intención de voto de los burgaleses en vísperas del inicio de la campaña electoral en la que Ciudadanos sería la principal sorpresa en las urnas, debutando con cinco concejales en Burgos, lo que la convertiría en la tercera fuerza más votada.
Si las elecciones se celebrasen hoy mismo, el Partido Popular seguiría siendo, según el sondeo, el partido más votado por los burgaleses, aunque perdería un 6,5% de sus papeletas, lo que implicaría que no podría gobernar sin apoyos, al menos para la investidura. El PP obtendría 13 concejales, frente a los 15 que logró en 2001 y se quedaría a las puertas de la mayoría absoluta (14 ediles).
El PSOE de Daniel de la Rosa, por su parte, perdería un concejal -sumaría 7- y se quedaría lejos de convertirse en una alternativa de gobierno por sí mismo, con un 23,6% de votos, un 2,9% menos.
La proyección de voto C’s es la principal variable en la futura composición de la Corporación municipal de Burgos. Su irrupción con al menos cinco concejales en el Pleno se lleva por delante la mayoría absoluta de Lacalle y fulmina por completo a UPyD, flor de un día en el Ayuntamiento de Burgos. Los magenta pasan de tres concejales en 2011 a recibir hoy poco menos del cuatro por ciento de los votos, lo que les dejará claramente sin ningún representante.
Efecto Ciudadanos
Ciudadanos es el azote del Partido Popular del mismo modo que también rebaña cuatro de cada diez de sus votos de PSOE y UPyD. La encuesta realizada para EL CORREO DE BURGOS refleja que de cada diez papeletas que obtendría C’s, dos le vendrían del PSOE, otras dos de UPyD, y apenas una de sus nuevos votantes. Pero el principal caladero de votos de los de Albert Rivera es el Partido Popular, de donde proceden más del 34% de sus sufragios. No sólo podría articular un grupo municipal propio sino que se constituye en la llave de la gobernabilidad del Ayuntamiento de Burgos.
Sus cinco concejales le dan la capacidad de elegir entre Populares y Socialistas para designar al nuevo alcalde, si bien es cierto que Daniel de la Rosa necesitaría convencer también a Imagina Burgos para desbancar a Javier Lacalle. Esa posibilidad, si bien existe, entra en contradicción con los principios generales de la formación que lidera Albert Rivera, quien ha confirmado que su partido no entrará a gobernar en ningún ayuntamiento en el que no sea la fuerza más votada. Esa premisa implica que Javier Lacalle tendrá que llegar a un acuerdo con el grupo de concejales de Gloria Bañeres si quiere que no obstaculicen su nombramiento como alcalde y, siempre y cuando, en la dirección nacional de C’s autoricen esa operación.
Aunque la candidatura que encabeza en Burgos Gloria Bañeres es la gran novedad de la proyección de voto que se refleja en la encuesta de EL CORREO DE BURGOS, su espectacular avance no termina del todo con el tradicional bipartidismo del electorado burgalés. PP y PSOE siguen siendo las fuerzas más votadas en todos los tramos de edad, seguidos de C’s, que aparece como el árbitro de la gobernabilidad del Ayuntamiento. Un 15,5% por ciento de los encuestados por Celeste-Tel reconoce que en los comicios del 24 de mayo tiene intención de votar a Ciudadanos; de ellos, uno de cada tres votó al PP en 2011. No sólo son los populares quienes nutren la creciente lista de apoyos de C’s. Un 20% de sus futuros votos proviene del PSOE y otro tanto de UPyD.
Imagina Burgos, la marca local con la que se pretendía replicar en Burgos el efecto Podemos, lograría doblar la representación que obtuvo IU, pero no pasaría de ser una opción minoritaria. La encuesta le atribuye un 7,4% de los votos y dos concejales y sólo destaca como opción de voto entre los más jóvenes.
el pp contra sí mismo
Con la proyección final de C’s aún por determinar, Lacalle aún puede contar con la confirmación de que el PP es claramente la fuerza más votada en Burgos, en todas las franjas de edad y en todos los grupos sociales. Es más, es ampliamente mayoritaria la convicción de que la ciudad de Burgos ha evolucionado mejor que el resto bajo su mandato, según evidencia la encuesta, pero parece que su problema radica en que esa valoración no se traduce de forma automática en intención de voto.
Además, el sondeo revela que Javier Lacalle es el candidato más conocido de cuantos se presentan a las elecciones y el que mejor valoración global tiene.
De los votos que en las anteriores elecciones fueron al PP, un 12% se redirigiría, según la encuesta de EL CORREO DE BURGOS en los comicios de mayo hacia la abstención, Es decir, que el peor enemigo de los populares está en que parte de su electorado prefiere quedarse en casa antes que volver a votar al alcalde popular. Y pese a que el PP es el partido que más fideliza a sus votantes, según el sondeo, otro 10% recala en Ciudadanos. Por su parte, el PSOE también sufre por la fuga de votos y la fidelidad de sus votantes está aún más comprometida que la de los populares, cuyas deserciones van a parar casi exclusivamente a Ciudadanos. En el caso del PSOE, por el contrario, un 12,7% de sus votantes asegura que se quedará en casa el 24 de mayo, mientras que el 11,1% anuncia que votará a C’s; el 6,3%, lo haría a Imagina Burgos; el 4,8% tiene en mente apoyar a UPyD y un 1,6% daría su voto a Progresa Burgos.
Crisis en la izquierda
Si asumimos que C’s es un partido centrista, vemos que la encuesta de Celeste-Tel para EL CORREO DE BURGOS refleja el inmovilismo electoral de los partidos más a la izquierda en Burgos. El PSOE pierde un concejal y pasa de 8 a 7, mientras que Imagina Burgos -herederos de IU y el voto en blanco- dobla su representación y pasa de uno a dos ediles. Dicho sea de otro modo, la extrema izquierda tiene un techo electoral en Burgos mientras que el socialismo mantiene un suelo de votantes que lo mantiene muy por encima de esas formaciones, aunque sin la opción de gobernar por sí mismo. Entre los dos sumarían nueve ediles, los mismos que hace cuatro años.
Ciudadanos no es el único que debuta en la corporación municipal burgalesa. El sondeo revela que la coalición Imagina Burgos, iniciada bajo auspicios de Podemos, aunque finalmente la formación de Pablo Iglesias se retiró de su organigrama, tendrá sus frutos electorales y duplicaría los votos obtenidos por Izquierda Unida en 2011.
La lista encabezada por Raúl Salinero sumaría 5.735 papeletas, 1.185 más que en los últimos comicios a los que concurrió IU en solitario con el mismo cabeza de cartel. Pese al avance en votos se mantiene como el partido municipal con menos apoyos electorales. Imagina Burgos avanza en las urnas fundamentalmente porque consigue ‘pescar’ a 1.431 ex votantes del PSOE. Así, el 25 por ciento de sus electores fue antes de los socialistas.
UPYD y Porbur
El mayor batacazo, según la encuesta, se atribuye a UPyD que confirma otros sondeos que ya vaticinaban que la formación magenta sería víctima de su propia crisis y quedaría de nuevo, sin representatividad en el Ayuntamiento después de haber tenido tres concejales.
Progresa Burgos, el partido de Roberto Alonso se quedaría claramente fuera de la corporación con apenas 3.035 votos, un 3,9% del total, emitidos, principalmente, por los menores de 44 años. Sus apoyos le vienen dados por la fuga de votos del PSOE (358 papeletas), pero también de antiguos votantes de Izquierda Unida, que ve como el 6,7% de sus sufragios acaba en manos de Alonso en vez de Imagina Burgos, su recorrido natural.
VOX, por su parte, apenas lograría un 0,4% de los sufragios, mientras que el voto en blanco suma 4.521 sobres vacíos y la abstención crece más de cinco puntos hasta casi el 40 por ciento.
La encuesta realizada para EL CORREO DE BURGOS por Celeste-Tel anticipa una foto fija de la intención de voto de los burgaleses en vísperas del inicio de la campaña electoral en la que Ciudadanos sería la principal sorpresa en las urnas, debutando con cinco concejales en Burgos, lo que la convertiría en la tercera fuerza más votada.
Si las elecciones se celebrasen hoy mismo, el Partido Popular seguiría siendo, según el sondeo, el partido más votado por los burgaleses, aunque perdería un 6,5% de sus papeletas, lo que implicaría que no podría gobernar sin apoyos, al menos para la investidura. El PP obtendría 13 concejales, frente a los 15 que logró en 2001 y se quedaría a las puertas de la mayoría absoluta (14 ediles).
El PSOE de Daniel de la Rosa, por su parte, perdería un concejal -sumaría 7- y se quedaría lejos de convertirse en una alternativa de gobierno por sí mismo, con un 23,6% de votos, un 2,9% menos.
La proyección de voto C’s es la principal variable en la futura composición de la Corporación municipal de Burgos. Su irrupción con al menos cinco concejales en el Pleno se lleva por delante la mayoría absoluta de Lacalle y fulmina por completo a UPyD, flor de un día en el Ayuntamiento de Burgos. Los magenta pasan de tres concejales en 2011 a recibir hoy poco menos del cuatro por ciento de los votos, lo que les dejará claramente sin ningún representante.
Efecto Ciudadanos
Ciudadanos es el azote del Partido Popular del mismo modo que también rebaña cuatro de cada diez de sus votos de PSOE y UPyD. La encuesta realizada para EL CORREO DE BURGOS refleja que de cada diez papeletas que obtendría C’s, dos le vendrían del PSOE, otras dos de UPyD, y apenas una de sus nuevos votantes. Pero el principal caladero de votos de los de Albert Rivera es el Partido Popular, de donde proceden más del 34% de sus sufragios. No sólo podría articular un grupo municipal propio sino que se constituye en la llave de la gobernabilidad del Ayuntamiento de Burgos.
Sus cinco concejales le dan la capacidad de elegir entre Populares y Socialistas para designar al nuevo alcalde, si bien es cierto que Daniel de la Rosa necesitaría convencer también a Imagina Burgos para desbancar a Javier Lacalle. Esa posibilidad, si bien existe, entra en contradicción con los principios generales de la formación que lidera Albert Rivera, quien ha confirmado que su partido no entrará a gobernar en ningún ayuntamiento en el que no sea la fuerza más votada. Esa premisa implica que Javier Lacalle tendrá que llegar a un acuerdo con el grupo de concejales de Gloria Bañeres si quiere que no obstaculicen su nombramiento como alcalde y, siempre y cuando, en la dirección nacional de C’s autoricen esa operación.
Aunque la candidatura que encabeza en Burgos Gloria Bañeres es la gran novedad de la proyección de voto que se refleja en la encuesta de EL CORREO DE BURGOS, su espectacular avance no termina del todo con el tradicional bipartidismo del electorado burgalés. PP y PSOE siguen siendo las fuerzas más votadas en todos los tramos de edad, seguidos de C’s, que aparece como el árbitro de la gobernabilidad del Ayuntamiento. Un 15,5% por ciento de los encuestados por Celeste-Tel reconoce que en los comicios del 24 de mayo tiene intención de votar a Ciudadanos; de ellos, uno de cada tres votó al PP en 2011. No sólo son los populares quienes nutren la creciente lista de apoyos de C’s. Un 20% de sus futuros votos proviene del PSOE y otro tanto de UPyD.
Imagina Burgos, la marca local con la que se pretendía replicar en Burgos el efecto Podemos, lograría doblar la representación que obtuvo IU, pero no pasaría de ser una opción minoritaria. La encuesta le atribuye un 7,4% de los votos y dos concejales y sólo destaca como opción de voto entre los más jóvenes.
el pp contra sí mismo
Con la proyección final de C’s aún por determinar, Lacalle aún puede contar con la confirmación de que el PP es claramente la fuerza más votada en Burgos, en todas las franjas de edad y en todos los grupos sociales. Es más, es ampliamente mayoritaria la convicción de que la ciudad de Burgos ha evolucionado mejor que el resto bajo su mandato, según evidencia la encuesta, pero parece que su problema radica en que esa valoración no se traduce de forma automática en intención de voto.
Además, el sondeo revela que Javier Lacalle es el candidato más conocido de cuantos se presentan a las elecciones y el que mejor valoración global tiene.
De los votos que en las anteriores elecciones fueron al PP, un 12% se redirigiría, según la encuesta de EL CORREO DE BURGOS en los comicios de mayo hacia la abstención, Es decir, que el peor enemigo de los populares está en que parte de su electorado prefiere quedarse en casa antes que volver a votar al alcalde popular. Y pese a que el PP es el partido que más fideliza a sus votantes, según el sondeo, otro 10% recala en Ciudadanos. Por su parte, el PSOE también sufre por la fuga de votos y la fidelidad de sus votantes está aún más comprometida que la de los populares, cuyas deserciones van a parar casi exclusivamente a Ciudadanos. En el caso del PSOE, por el contrario, un 12,7% de sus votantes asegura que se quedará en casa el 24 de mayo, mientras que el 11,1% anuncia que votará a C’s; el 6,3%, lo haría a Imagina Burgos; el 4,8% tiene en mente apoyar a UPyD y un 1,6% daría su voto a Progresa Burgos.
Crisis en la izquierda
Si asumimos que C’s es un partido centrista, vemos que la encuesta de Celeste-Tel para EL CORREO DE BURGOS refleja el inmovilismo electoral de los partidos más a la izquierda en Burgos. El PSOE pierde un concejal y pasa de 8 a 7, mientras que Imagina Burgos -herederos de IU y el voto en blanco- dobla su representación y pasa de uno a dos ediles. Dicho sea de otro modo, la extrema izquierda tiene un techo electoral en Burgos mientras que el socialismo mantiene un suelo de votantes que lo mantiene muy por encima de esas formaciones, aunque sin la opción de gobernar por sí mismo. Entre los dos sumarían nueve ediles, los mismos que hace cuatro años.
Ciudadanos no es el único que debuta en la corporación municipal burgalesa. El sondeo revela que la coalición Imagina Burgos, iniciada bajo auspicios de Podemos, aunque finalmente la formación de Pablo Iglesias se retiró de su organigrama, tendrá sus frutos electorales y duplicaría los votos obtenidos por Izquierda Unida en 2011.
La lista encabezada por Raúl Salinero sumaría 5.735 papeletas, 1.185 más que en los últimos comicios a los que concurrió IU en solitario con el mismo cabeza de cartel. Pese al avance en votos se mantiene como el partido municipal con menos apoyos electorales. Imagina Burgos avanza en las urnas fundamentalmente porque consigue ‘pescar’ a 1.431 ex votantes del PSOE. Así, el 25 por ciento de sus electores fue antes de los socialistas.
UPYD y Porbur
El mayor batacazo, según la encuesta, se atribuye a UPyD que confirma otros sondeos que ya vaticinaban que la formación magenta sería víctima de su propia crisis y quedaría de nuevo, sin representatividad en el Ayuntamiento después de haber tenido tres concejales.
Progresa Burgos, el partido de Roberto Alonso se quedaría claramente fuera de la corporación con apenas 3.035 votos, un 3,9% del total, emitidos, principalmente, por los menores de 44 años. Sus apoyos le vienen dados por la fuga de votos del PSOE (358 papeletas), pero también de antiguos votantes de Izquierda Unida, que ve como el 6,7% de sus sufragios acaba en manos de Alonso en vez de Imagina Burgos, su recorrido natural.
VOX, por su parte, apenas lograría un 0,4% de los sufragios, mientras que el voto en blanco suma 4.521 sobres vacíos y la abstención crece más de cinco puntos hasta casi el 40 por ciento.
Fuente: Correo de Burgos