Por qué la hucha de las pensiones podría ser determinante en la petición de rescate de España
El ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos.
Foto: Archivo
La continua pérdida de cotizantes que se viene registrando desde el inicio de la crisis puede tener unas consecuencias más dramáticas de lo previsto. Si el Gobierno se ve obligado a tirar a menudo del Fondo de Reserva podría quedarse sin uno de sus principales inversores. Y hay quien cree que esto sucederá más pronto que tarde.
El hecho de que este año el Gobierno haya tenido que recurrir en dos
ocasiones al depósito que garantiza las pensiones para pagar las pensiones
confirma una situación que tiene visos de empeorar: el colapso del sistema de la
Seguridad Social. Pero el problema podría ir a peor e, incluso, dar la estocada
para que España pida el rescate.
La hucha no es infinita, y menos si se tiene en cuenta que casi un
90% de su capital está invertido en deuda española, según recoge hoy The
Wall Street Journal.
Emplear el Fondo para cubrir parte de las emisiones de deuda ha
servido al Gobierno para esquivar los problemas de financiación en el mercado,
donde también ha contado con el respaldo de la banca nacional. Sin embargo, los
expertos consultados por el diario estadounidense consideran que esta vía podría
agotarse antes de lo previsto, en atención a la falta de recursos para cubrir
las prestaciones sociales.
¿Cómo pagar las pensiones?
Las alarmas saltaron en septiembre, cuando por primera vez en la historia el
Gobierno tuvo que echar mano del Fondo de Reserva para abonar las nóminas a los
pensionistas. Un total de 3.063 millones de euros fueron extraídos de este
instrumento, a los que se sumaron los 3.530 millones que Moncloa necesitó en
noviembre para costear la revalorización de las pensiones.
Este segundo recurso vino acompañado de polémica, ya que el
Ejecutivo se vio obligado a cambiar la normativa del Fondo para ampliar el
tope de dinero del que se podía disponer en un mismo ejercicio. El cambio de
este límite, que estaba fijado en el 3% del gasto de las pensiones para el año,
elevó la cantidad utilizada en 2012 hasta los 6.593 millones de euros y
posibilitó que el Estado capease una "situación coyuntural de insuficiencia
financiera" de la Seguridad Social.
Pero las dudas sobre la sostenibilidad del sistema ya estaban sembradas y los
expertos comenzaron a hacer sus propias cuentas para calcular cuánto tiempo
podrá mantenerse esta situación antes de desemboque en una petición de rescate
por parte de España.
Financiación y trucos contables
Analistas
consultados por el elEconomista apuntaban recientemente que a este
ritmo, en dos años como mucho el dinero ahorrado habrá volado. Pero el problema
podría ser mayor. En atención a los últimos datos del Fondo de Reserva, a cierre
de 2011 existe otro escollo, ya que casi la totalidad de los activos financieros
en los que ha invierte son deuda pública española.
Entre enero y diciembre de 2011, el Fondo adquirió cerca de 57.150
millones de euros en obligaciones, bonos y letras del Estado, lo que supone el
89,7% de la cartera de activos, que al finalizar el pasado año ascendía a
63.716,7. Los 6.568,6 millones restantes (el 10,31% del total) corresponden a
activos extranjeros de Alemania, Francia y Países Bajos, según
detalla el organismo en su informe. En 2008, el porcentaje de papeles
españoles en manos de la hucha de las pensiones era del 55%.
A 31 de diciembre de 2011, el total disponible en el Fondo de Reserva se
situó en 66.815 millones de euros, una cantidad que en 2012 habrá bajado hasta
situarse alrededor de los 60.220 millones, tras el dinero empleado para al abono
de las pensiones en septiembre y noviembre.
"La mayor parte de la financiación es un truco contable", indica
Javier Díaz-Giménez, profesor de economía en la escuela de negocios IESE de
España. "El Gobierno está prestando dinero a otra rama del Gobierno", añade.
Distribución de la cartera de activos financieros del Fondo de Reserva
A 31 de diciembre de 2011.Fuente: Seguridad Social
Problemas que están por llegar
Fuentes gubernamentales aseguran al WSJ que la fuerte inversión de la
hucha en deuda soberana española es sostenible porque España se sigue
financiando en los mercados financieros y reiteran que la recuperación económica
comenzará a partir de 2013.
En cambio, hay analistas que creen que los inversores seguirán desconfiando
de España a lo largo del próximo año, por lo que podría tener dificultades a la
hora de colocar los más
de 207.000 millones de euros que pretende emitir a lo largo del próximo
ejercicio.
En este punto, desde la web Zerohedge recuerdan que la gran diferencia
con respecto a otros países que emplean o han empleado tácticas similares para
financiarse, como EEUU o Irlanda, no dependían de una forma tan marcada del
respaldo de las entidades estatales en el papel de compradores.
"Con los inversores extranjeros fuera del mercado de deuda de España, vas a
necesitar todo el apoyo doméstico, pero éste podría no ser suficiente", afirma
Rubén Segura-Cayuela, economista de Bank of America-Merrill Lynch.
Fuente: elEconomista.es