“Es el momento de responder, de desplegar toda la energía social que hay en Burgos y ganar nuestra ciudad para la ciudadanía.”


La situación social y los derechos de las personas se deterioran en Burgos, como en otras muchas ciudades, a marchas forzadas. La constante pérdida de derechos fundamentales por parte de la mayoría social en beneficio de las élites económicas, justificados como única salida a la crisis económica, ha reducido nuestro estado democrático a límites inimaginables, hasta el punto de que los intereses de la ciudadanía y su opinión rara vez son tenidos en cuenta frente a la red de intereses económicos de una minoría privilegiada que se apropia de nuestro Ayuntamiento y demás Instituciones.
Han sido numerosas las iniciativas ciudadanas que han chocado en los últimos años con la arrogancia de un consistorio municipal que siempre se creyó por encima de su ciudadanía, pero el mejor ejemplo ha ocurrido este año con el conflicto del Bulevar de Gamonal, donde lo que opinase la ciudadanía no tenía el menor peso ni interés para el equipo de Gobierno municipal.
No nos sirve un Ayuntamiento arrogante. No nos vale un Ayuntamiento que obstaculiza y bloquea cualquier iniciativa vecinal, cultural o social que no controle, que considera la participación en la vida pública un problema y no la esencia misma de la democracia.
Ha habido mucha gente en Burgos que durante una larga travesía del desierto ha mantenido viva la voz de quienes creemos que es posible otra ciudad, y reivindicamos su trabajo, en ocasiones ingrato y sacrificado. Pero es tiempo de que la política la hagamos los de abajo, la mayoría social, para recuperar y construir colectivamente nuestro futuro. Es el momento de responder, de desplegar toda la energía social que hay en Burgos y ganar nuestra ciudad para la ciudadanía.
Entre todos y todas es posible hacerlo, por eso comenzamos por lanzar un proceso abierto a toda la ciudadanía para imaginar la Burgos que queremos, que nos merecemos. Un proceso para empezar a redactar un programa común que saque lo mejor de Burgos, sus barrios y su gente, que exprese los deseos de toda la población, que sirva para construir una ciudad joven y nueva, justa, culta y diversa, comprometida con un desarrollo sostenible y con los derechos de todos sus habitantes. Una ciudad funcional, que apueste por un nuevo modelo económico, donde se cuide con especial celo lo público y se estimule una economía social y plural que permita trabajar con dignidad sin emigrar, y donde la participación ciudadana sea el eje de un nuevo modelo de ciudad frente a la política de los despachos en la que siempre ganan los de siempre y la mayoría social sufre las consecuencias.
Ese cambio solo será posible con una amplia participación. Será necesario que todos los que creamos en esta posibilidad tengamos generosidad y apertura de miras. Desde el activismo social, desde las formaciones políticas, promovemos un cambio de mentalidad que ponga el beneficio común por encima del particular. El ideas antes que personas.
Este proceso de debate programático pretende sumar y converger, encontrar puntos de unión entre las diversas asociaciones, grupos y personas que estén dispuestas a trabajar por esa idea de una nueva ciudad de Burgos.
Nos iremos encontrando por el camino y, a cada paso, sabremos que estamos más cerca de ganar la ciudad para su gente.